Políticas

30/7/2009|1093

ELECCIONES EN SALTA | El Partido Obrero enfrenta a la reacción terrateniente y al gobierno

Luego de la derrota electoral del gobierno provincial y de los K, las patronales del campo salteño se han sentido envalentonadas. Quieren revertir la suspensión de los desmontes que decidió la Corte Suprema de Justicia a partir de un reclamo de comunidades aborígenes, y obligó al gobierno a reducir casi a una quinta parte la cantidad de hectáreas a desmontar.

A la cabeza de los sojeros se ha colocado Alfredo Olmedo, senador recientemente electo diputado nacional por una lista escindida del PJ. Este sojero millonario habría obtenido del ex gobernador Romero la concesión de 350 mil hectáreas de Salta Forestal y pactado un texto de la ley de ordenamiento territorial, que autorizaba el desmonte de hasta cinco millones de hectáreas. En el texto original de esta ley también intervinieron los ingenios Ledesma y Tabacal, grandes grupos sojeros, mineras y petroleras a través de una fundación (Fundesnoa).

Los reclamos se hicieron oír en movilizaciones patronales en Orán y Tartagal. Detrás de una supuesta defensa de los 7.000 puestos de trabajo de los trabajadores de la madera se levantó un petitorio con reclamos, que incluye exenciones de todos los impuestos por dos años, créditos blandos, un fondo fiduciario, etc. Muchos de los patrones que encabezaron la marcha están denunciados por explotar trabajadores en condiciones de esclavitud. En la protesta participaron todos los representantes de los partidos patronales, incluidos legisladores nacionales y provinciales.

Urtubey trató de apaciguarlos con el señalamiento de que la ley se revisa cada cinco años (un período suficiente para desmontar el millón y medio de hectáreas autorizado). Sin embargo, terminó consiguiendo una disposición de la Corte para habilitar la extracción de madera y hasta prometió revisar la reglamentación de la ley de ordenamiento.

Los capitalistas y terratenientes quieren, además de la extensión de la frontera agropecuaria, suplantar cultivos para permitir la producción de materia primara para biocombustibles. Es lo que hace El Tabacal: eliminar la naranja, la banana y el tomate, que dejará miles de desocupados para extender las plantaciones de caña. Los capitalistas van a una profundización del saqueo ambiental y social, y para eso acentuarán la represión.

Las luchas obreras

En oposición a la avanzada patronal, los trabajadores de los dos ingenios de Salta paralizaron totalmente la producción, tanto en el campo como en la industria. El gobierno se puso incondicionalmente del lado de las patronales. Para Urtubey, Tabacal es el “modelo productivo” en la provincia.

En el caso de San Isidro, en la localidad de Campo Santo, la huelga azucarera tuvo características de rebelión popular. La masiva movilización de todo el pueblo finalmente determinó que la empresa otorgara las reivindicaciones.

Además de las luchas de los trabajadores municipales, continúa la movilización contra el gerenciamiento de hospitales en Capital y Cafayate, que va sumando mayor adhesión popular.

La derecha como excusa

El frente que llevó a Urtubey al gobierno está casi deshecho. Lo que ya se vio en las elecciones del 28 de junio se ha profundizado para las provinciales de septiembre. También el Frente Grande y Libres del Sur, que apoyaron a Urtubey, saldrán con listas propias en septiembre. Sin embargo, ya han encontrado una excusa para seguir dentro del gobierno; el avance de la derecha, con Olmedo a la cabeza. Pero ninguno siquiera se pronunció para apoyar la huelga de los trabajadores azucareros contra la patronal “restauradora”.

Nuestro papel, perspectiva y programa

El Partido Obrero se jugó entero por el triunfo de la huelga azucarera y está con todo metido en la lucha en defensa de la salud pública. Nuestra participación decidida nos ha ganado un gran respeto entre los trabajadores azucareros, y dado las condiciones para formar agrupamientos clasistas en las localidades de los ingenios. Algunos de los delegados de estas luchas encabezan nuestra lista de concejales en Hipólito Irigoyen (Tabacal). El resultado obtenido el 28 de junio ha insuflado mayor confianza en los luchadores. Con el humo aún saliendo de las ollas populares iniciaremos la campaña para las elecciones provinciales de septiembre.

Planteamos:

• Nacionalización de los hidrocarburos y recursos mineros. Expropiación de los grandes latifundios.

• Derogación del estatuto del peón rural.

• Salario mínimo igual al costo de la canasta familiar por ocho horas de trabajo.

• Subsidio al parado del 82% del salario para los desocupados y trabajadores de la madera.

• Reserva del 40% de las tierras urbanas para viviendas populares.
• Por una salud pública universal y gratuita.
vAbajo el gerenciamiento privado y/o arancelario de los hospitales públicos.

Pablo López