Faltando tres meses para las elecciones en San Juan, se va definiendo el panorama de los comicios al que será sometido el pueblo sanjuanino. Luego de que oficialismo y oposición se pusieran de acuerdo para posponer todo el cronograma electoral, la fecha para las primarias quedó establecida para el 14 de septiembre, y para noviembre las generales. La provincia debe elegir a tres representantes para la Cámara baja.

La elección provincial busca ser polarizada, al igual que a nivel nacional, entre dos bloques patronales: el Frente de Todos y Juntos por el Cambio (que en San Juan se autodenomina Con Vos).

Según vienen marcando los medios locales, el Frente de Todos presentará para las Paso alrededor de cinco listas diferentes: “la intención claramente es fomentar la competencia interna y llamar la atención del electorado en las Paso” (Tiempo de San Juan, 27/3). Los cargos de las listas serán cubiertos por integrantes del gabinete y de la “mesa chica” más afines al gobernador Sergio Uñac. Los candidatos que extraoficialmente suenan son los funcionarios de primera línea del gobierno provincial que están pisando fuerte en el contexto de pandemia, como la ministra de Salud Alejandra Venerando, Carlos Munisaga de Seguridad, Fabiola Aubone de Gobierno, Claudia Grynszpan de Turismo, Jorge Chica de Deportes, y Fabio Aballay de Desarrollo Humano. Inclusive formarán parte de la interna otros sectores del peronismo, por ejemplo los más cercanos al exgobernador José Luis Gioja y el propio Partido Bloquista, quienes también tendrían una lista propia.

Por el otro lado, el bloque de Con Vos también va camino a las internas. Los distintos partidos que forman parte del espacio liderado por Marcelo Orrego analizan presentar listas propias, aunque todavía no está definido. Los partidos que perfilan a tener candidatos son Producción y Trabajo, el PRO y Actuar. En el caso de la UCR manifestaron que lo más adecuado sería ir a una lista de consenso. Recordemos que a nivel provincial el PRO viene de un gran golpe luego de que la vicepresidenta del partido, Gimena Martinazzo, denunciara al principal referente Eduardo Cáceres por violencia de género -quien sigue procesado.

Esta polarización recolectó la mayoría del electorado en las últimas elecciones sanjuaninas. Sin embargo, representan unívocamente intereses patronales, dejando las amplias necesidades de trabajadores y minorías sin una expresión clara en dónde canalizar exitosamente sus reclamos. El consenso de ambos frentes en temas como la megaminería en época de crisis hídrica, acuerdos salariales a la baja, represión a reclamos populares entre otros desnuda y pone en evidencia la necesidad de ofrecer una alternativa política superadora.

Las principales demandas de los trabajadores

La crisis sanitaria, social y económica viene golpeando fuerte en la espalda de los y las trabajadoras ocupadas y desocupadas sanjuaninas. El mandatario provincial hace oídos sordos al aumento de cifras de víctimas de la pandemia en San Juan, que en este momento asciende a más de 800 personas. Los protocolos en los lugares de trabajo no existen, los despidos crecen al calor de la crisis y los desocupados de la provincia no encuentran una respuesta a la demanda por trabajo genuino y condiciones de sanidad.

La creación del Consejo Provincial Integral de la Mujer en marzo de este año es una pantomima: con amplia mayoría de representantes del gobierno (cinco miembros titulares del Poder Ejecutivo, cuatro miembros titulares del Poder Legislativo y cuatro miembros titulares del Poder Judicial), un titular por universidades públicas y privadas y un titular por organización social con personería jurídica (dejando fuera a las decenas de organizaciones de base y comunitarias), constituye una maniobra que bajo el título de “protección integral de la mujer” oculta que no implica ninguna de las políticas que nos atañen como mujeres, diversidades y trabajadorxs. Sumado a esto, siguen existiendo problemas en la aplicación de la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo en la provincia.

San Juan acumula números elevadísimos de despedidos y desocupados en lo que va del año. En la cadena de venta de electrodomésticos Garbarino los trabajadores protagonizaron una ardua pelea por el aumento de los salarios y contra las suspensiones. También es el caso de Compumundo, que en abril pasado cerró sus puertas dejando a empleados en la calle con solo 48 horas de anticipación: “les dieron un 25% de los haberes solamente a los que iban de manera presencial, mientras que los que tuvieron licencia Covid-19 o cursaron alguna otra patología no fueron alcanzados por este desembolso de dinero” (Huarpe, 17/4). Los despedidos Falabella, Ribeiro y Ansilta también sufrieron la nula disposición del gobierno provincial de dar una respuesta a los trabajadores, ya que ninguno recibió la doble indemnización que prevé el decreto nacional.

En el sector estatal la situación no difiere en lo absoluto. Gran parte de las reparticiones vienen denunciado el vaciamiento respecto a herramientas de protección sanitarias y el presupuesto para poder hacerle frente a la pandemia y a la crisis. Los salarios son ajustados a la baja. El gobierno hace volver a la presencialidad, sin protocolos, a los trabajadores estatales mayores de 60 años y con enfermedades prevalentes.

El Estado provincial precariza cada vez más a sus trabajadores: monotributistas que deben ser renovados cada año, contratos basura bajo la modalidad de licitación de servicios sin ninguna relación de dependencia, tercerización en “cooperativas” de trabajadores (profesionales y no profesionales), todos con sueldos bajo la línea de pobreza, incluso los salarios de los trabajadores de planta permanente. Tan avanzada es la precarización que los trabajadores de planta permanente representan en la actualidad aproximadamente solo un 40 a 50% de la planta total.

Durante la última década la provincia sufrió una disminución paulatina del caudal de sus ríos, fruto del calentamiento global, así como la reducción nívea, declara la página del Inta San Juan. La crisis hídrica es histórica en la provincia, y mientras las políticas del gobierno provincial descansan sobre consejos para los vecinos de los horarios para regar promueve los megaproyectos mineros que se están desarrollando en la provincia agravan la situación. El emprendimiento de extracción de plata, cobre y oro Josemaría choca con la negativa popular y de las asambleas de base -consumiría más energía que la que consume actualmente todo San Juan.

La salida es  reforzar la organización y lucha de los y las trabajadoras. El Polo Obrero viene copando todas las semanas las calles, poniendo sobre tablas la importancia de luchar bajo un programa y dejando en claro que los trabajadores no vamos a dejar pasar este ajuste. En las elecciones próximas pondremos como hoja de ruta las demandas de la población trabajadora y dejaremos en claro que la única salida es el voto al Frente de Izquierda – Unidad. Por un salario mínimo igual a la canasta básica, la defensa de los puestos de trabajo ante cierres y despidos, un subsidio al desocupado de 40.000 pesos mensuales, la real aplicación de la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, por un Consejo Autónomo de la Mujer con cargos electos y revocables, por la defensa del agua y nuestros recursos ambientales.