Políticas

12/6/2008|1041

En recuerdo de Oscar F. Alajarin

Buenos Aires, 3 de junio de 2008

Compañeros de Prensa Obrera:

De mi consideración:

Días atrás y caminando por las calles de Remedios de Escalada (Buenos Aires) tuve la satisfacción de enterarme que la que llevaba el nombre del genocida prusiano "Coronel Federico Rauch" ha pasado a llamarse ahora "Oscar F. Alajarin", un obrero ferroviario de la zona desaparecido bajo la última dictadura militar. De esta manera, una reciente disposición legislativa local ha dado cumplimiento a la iniciativa vecinal que venía propiciándolo.

Pude averiguar ese mismo día que con tal motivo, tuvo lugar un acto llevado a cabo en un local donde se esperaba contar con la esclarecedora presencia de Osvaldo Bayer -presidente honorario de la Asociación Civil y Cultural Vorwärts a la que también pertenezco-, algo que no pudo concretarse porque se encuentra aún en Europa, tras la muerte de su querido nieto Bruno. Y también que las movilizaciones vecinales llegaron a sustituir aquel aborrecido nombre por el de "Arbolito", un indio de nuestras pampas que terminara con la vida de ese militar que venía masacrando a las tribus rebeldes, cayendo sobre él después de haber enlazado a su caballo con las boleadoras, y cortándole la cabeza; esto suscritó que el anterior intendente de ese partido, Manuel Quindimil, dispusiera restablecer en esa calle la denominación alterada, lo cual se hizo poniéndole en cambio "General Federico Rauch", es decir, cometiendo aquí un error equivalente a un ascenso post-mortem…

Para terminar, me dirijo por este medio a la Legislatura porteña para que adopte una similar medida con el pasaje Rauch, que comunica las calles Medrano y Salguero. Y también, como Bayer lo ha venido propiciando, que una de las ciudades de la provincia de Buenos Aires deje por fin de tener tan ominoso nombre.

Solicitando la publicación de estas líneas, les saluda fraternalmente,

 

Alberto De Renzis, presidente del Club Socialista Vorwärts