Políticas

28/8/2003|815

Es oficial, Izquierda Unida con Ibarra

Más allá de que Ripoll dijera, según Página/12 (26/8), que “el Mst e Izquierda Unida llamamos a no apoyar a ninguno de los dos”, Patricio Echegaray elaboró muy claramente, ante Gerardo Yomal, en FM Palermo, la necesidad de votar por Ibarra en la segunda vuelta (Detrás de las Paredes, 21/8). Dos semanas antes, en un programa de televisión, Patricia Walsh había explicado que no se volvería a equivocar, como cuando llamó al voto en blanco frente al frustrado ballotage entre Kirchner y Menem.


Echegaray le dijo a Yomal que “…no se puede igualar a Menem con Kirchner porque Menem es la aplicación fundamentalista del modelo neoliberal y Kirchner es un gobierno que sobrevive después de la derrota del menemismo y del Pacto de Olivos y que se propone un programa que todavía no es preciso pero que supuestamente plantea recuperar la producción”. Todo esto fue dicho para concluir que “al ballotage hay que saber manejarlo. La primera elección es una elección, la segunda será una opción y habrá que elegir al menos malo”. Más adelante, Echegaray definió al “menos malo” de este modo, en relación a las elecciones en la ciudad de Buenos Aires: “Ibarra, desde la Alianza, no pudo diferenciarse de las políticas del menemismo, y de hecho les dio continuidad”. O sea que si llama a votar a la “continuidad del menemismo”, suponemos que porque no es su “aplicación fundamentalista”.


Más allá de esta manipulación e inconsistencia, el tema es que a Echegaray y a IU no les sale la palabra capitalismo; es decir que un obrero no debería votar a un capitalista, y no a cualquier capitalista sino a los grandes capitalistas. Que no debe votar por su verdugo social. Si lo hace renuncia, simplemente, a una estrategia de emancipación. El mal menor es votar contra Macri y contra Ibarra, porque es la premisa para ir a una conciencia realmente de clase y socialista.


Jorge Makarz, un aliancista e ibarrista, que fuera candidato de IU, saludó en el mismo programa de radio la posición de Echegaray. Así se teje la alianza izquierda-centro que propugna el PC y que, con el Mst, han puesto en marcha en la provincia de Buenos Aires en el frente con el PS. Un diputado nacional del PS, González, acaba de declarar que “tengo más amigos en el gobierno de Kirchner que los que tenía en el de De la Rúa”.