ESCOBAR | Victoria en la Escuela 17
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Siete docentes de la Escuela 17 de Matheu, incluyendo su directora y vice, fueron desplazadas de sus lugares de trabajo.
Las autoridades invocaron "maltrato a los alumnos" o, en el caso de los directivos, "apriete". Con una llamativa celeridad, el ministerio de Educación resolvió una descalificación y una sanción a compañeras sin que exista el menor conocimiento y debate sobre lo ocurrido.
La mayoría de los docentes del establecimiento y de los padres, junto a TD, el PO y otras agrupaciones, se movilizaron y arrancaron el regreso de las docentes a sus puestos. Una victoria a medias, porque se les siguen sustanciando los sumarios, es decir la ofensiva sigue en pie.
Existe, en este punto, una cuestión que es de principio para un trabajador de la educación -o para cualquier trabajador. No le reconocemos al estado patrón -o a cualquier patrón- el derecho de sanción a un trabajador. Si lo hiciéramos, le estaríamos otorgando al patrón o al estado el dominio de los lugares de trabajo, la "libertad" para sancionar a todo aquel que enfrente un manejo despótico o la explotación.
Por eso, reclamaos que los docentes de la 17 vuelvan a sus puestos sin sumarios.
La FEB se borró olímpicamente de este conflicto. La conducción del Suteba Escobar (PCR) intervino tardíamente. Está planteada una asamblea de los docentes de la 17, junto a los padres, para exigir el retiro de los sumarios y terminar de quebrar el brazo del Ministerio.
Nadie nos debe dividir en este punto: si dejamos correr las sanciones en la 17 creamos el terreno para convertirnos en rehenes del Estado patrón.
