Políticas

23/7/2016

Esteban Echeverría: amenaza de desalojo y represión

Son 500 familias sin techo.


El viernes 22 de julio nos llegó a los vecinos que estamos viviendo en los terrenos ubicados detrás del club San Marcos en Esteban Echeverría una orden de desalojo inminente por parte del juzgado de garantías descentralizado Nro. 2 de Esteban Echeverría. 


 


Ante la falta de vivienda propia, unas 500 familias hace dos meses ocupamos los terrenos que hace más de 50 años estaban deshabitados, siendo éstos un basural y un foco de inseguridad para los vecinos del barrio (donde se vendía droga, se asaltaron vecinos e incluso se produjeron violaciones). La toma es apoyada por los vecinos del lugar dado que a partir de ella se limpió la zona y ya no es un lugar peligroso. Familias de trabajadores desocupados o precarizados que no llegamos a los 6.000$ mensuales no podemos seguir pagando un alquiler y por ello decidimos asentarnos en el predio. Estamos exigiendo algo tan básico como el derecho a la vivienda y la tierra.


 


Hace poco mas de un mes sufrimos un primer desalojo, donde fuerzas de la policía bonaerense con la montada y de la policía local reprimieron e hirieron a mujeres, ancianos y niños. Lo hicieron por una acción judicial impulsada por empresa SIFSA (Sierras de Fiambala), que se reclama propietaria de los terrenos. Esta firma ha sido denunciada por vender ilegalmente terrenos protegidos de la laguna de Rocha.


 


Hace dos semanas nos movilizamos al municipio de Esteban Echeverría donde el señor Cañete, secretario de Tierra, nos atendió sin darnos respuesta y justificando la represión  que sufrimos.


 


Pedimos una solución a nuestro reclamo y hacemos responsable por nuestra integridad física al Juzgado de Garantías 2 de Esteban Echeverría; a la Municipalidad y a la Gobernación de la Provincia de Buenos Aires, de quienes dependen las fuerzas de seguridad. Aquí están viviendo centenares de niños, ancianos y mujeres.


Llamamos al conjunto de las organizaciones políticas, sociales y de derechos humanos, medios de comunicación y trabajadores a solidarizarse con nosotros y a exigir no al desalojo y la represión.