En Córdoba

El miércoles 6 de mayo, frente al aumento de los secuestros en Córdoba, miles de jóvenes nos movilizamos por las calles de la capital provincial bajo la consigna “basta de trata”.

Días antes de la marcha, el jefe de policía, Alejo Paredes, explicaba que los secuestros en Córdoba eran hechos aislados. También declaró que “no hay testigos de los raptos” y muchas veces las jóvenes lo inventan como excusa (Mañana de Córdoba, 8/5).

En Córdoba, los tratantes y proxenetas actúan con total impunidad y respaldo gubernamental. Ni los Luis Juez ni los Sachiaretti hicieron ni hacen nada para la aparición de todas las niñas, niños y mujeres desaparecidos; no hicieron ni hacen nada para detener el accionar de las redes de trata que actúan en la provincia; por el contrario, las respaldan con el aparato policial que habilita su accionar.

La crisis mundial ha transformado a nuestra provincia en un verdadero ‘shopping’ de niños y mujeres.

La movilización del 6 logró superar el cerco que imponían desde los medios, funcionarios y agentes de la policía.

Mujeres y hombres coreaban “yo sabía que a la red de trata, la cuida la policía”, y responsabilizaron directamente al gobierno y su oposición por la impunidad con la que se manejan estas redes.

Desde el Plenario de Trabajadoras dimos la batalla política previa, dentro y fuera de la comisión “Basta de Trata” (convocante de la marcha), y nos movilizamos responsabilizando a gobierno y oposición; exigiendo la aparición con vida de los/as desaparecidos/as en democracia, el desmantelamiento de las redes y el aparato policial, registro público de las personas desaparecidas, cárcel a tratantes y proxenetas, así como también a los responsables políticos y agentes de la policía involucrados, anulación de la ley de trata.

Esta marcha debe transformarse en el punto de partida para avanzar en la organización masiva de mujeres y hombres contra la trata de personas, enfrentando a todos sus responsables políticos y materiales.

Cintia Frencia (Plenario de Trabajadoras)