Scioli quiere dividir la oleada de paros estatales

La semana que pasó se hizo sentir el paro en los hospitales, en las escuelas y en los ministerios de Obras Públicas, Educación y en el Ioma. En otras reparticiones, como la Secretaría Electoral y la Subsecretaría de Adicciones, los paros se han extendido por tiempo indeterminado.

Con este panorama, la huelga tiene distintos focos de tensión.

Pero el gobierno de Scioli ha decido no ofertar nada mejor que la miseria del 8,9%. A cambio, para desactivar los lugares donde la protesta tiene mayor fuerza, ofrece ir por sectores y realizar paritarias sectoriales.

Pretende dividir el reclamo general de los estatales.

En el Ministerio de Obras Públicas, donde los trabajadores realizan asambleas y cortes de calles cotidianos, fuertemente combativos, el gobierno pretende aumentarles un 125% del básico a cambio de ampliar la jornada laboral de 30 a 40 horas. A los auxiliares otorgarles algún aumento miserable; otros, 149 pesos.

Desde que Scioli asumió la gobernación tiene esta política. Por el proyecto de ley marco trata de derogar la ley 10.430 imponiendo convenios por sector.

Se trata de la vieja táctica de “divide y triunfarás”. Pero se trata de una maniobra que de nada sirve a los trabajadores.

UPCN prácticamente ya aceptó la treta de Scioli. ATE sólo llama a parar junto a la CTA el 22 de abril.

Por una interestatal de la base para unificar la lucha

Si ellos quieren dividirnos, nosotros debemos unirnos.

Todos los estatales necesitamos un salario igual a la canasta familiar. Desde los cocineros de las escuelas hasta las sacrificadas enfermeras de los colapsados hospitales de la provincia.

No caigamos en la maniobra de un gobierno que le otorga a los sojeros la exención de la renta de la tierra a tasas irrisorias.

No caigamos en la trampa de un gobierno en crisis que se ha quedado sin su mejor recaudador (Montoya). El mismo gerente de la ARBA lo ha dicho en su carta de renuncia: la provincia recauda millones por mes.

Pero esos millones se los otorgan al campo, a la deuda pública y a las grandes empresas. Millones que paga el conjunto de los trabajadores. Queremos que esos millones vuelvan bajo la forma de aumentos de salarios genuinos, bajo la forma de nuevas escuelas, de hospitales y de obra pública.

Nosotros trabajamos. Ellos viven de nuestro trabajo.

Unifiquemos el reclamo, con asambleas en común. Reclamemos a nuestros gremios la unidad, por un aumento del 30%, en blanco, sin extensiones de jornadas laborales. Vayamos por 600 pesos de emergencia.

Hay crisis, que la paguen ellos.

Laura Kohn