Políticas

23/7/2009|1092

EXCLUSIVO DE INTERNET | Fuera Lieberman de Argentina

El canciller sionista, el racista de ultraderecha Avigdor Lieberman, se encuentra de gira por América latina, dicen que para contrarrestar la influencia de Irán. El gobierno anunció que lo recibirá el canciller Jorge Taiana. La Cancillería israelí, en cambio, dijo que el propagandista de la limpieza étnica contra el pueblo palestino se reunirá con la presidenta, con Mauricio Macri, con Taiana y con legisladores. La acogida supera por lejos el trato que le dio a Lieberman el francés Nicolás Sarkozy, quien le solicitó al primer ministro Benjamin Natanyahu que lo excluyera de la reciente reunión entre ambos en París (Yediot Aharonot, 30/6; Haaretz, 2/7).

Quién es Lieberman  

Varias veces diputado y ministro, líder del partido racista Yisrael Beiteinu (“Israel es Nuestra Casa”), Lieberman es un fascista que en 2006 propuso aplicar la “solución rusa en Chechenia” a la Franja de Gaza: invasión y bombardeos masivos a la población civil. Cuando Israel ejecutó “la solución chechena” en diciembre de 2008, asesinando más de 1.400 palestinos, Lieberman criticó la retirada por prematura y dijo que había que olvidar las “armas convencionales” (¡fósforo blanco y bombas de desfragmentación!) para arrojar una bomba atómica en Gaza y Cisjordania (“como los norteamericanos hicieron con los japoneses en la II Guerra, después no hizo falta una ocupación”, Haaretz, 12/08).

Lieberman, partidario de la limpieza étnica, quiere aplicarles “el transfer (la expulsión)” a los palestinos que habitan en Israel, a los que considera “un problema todavía mayor” que los territorios ocupados (BBC, 3/2/08). Desde 2004 propone el Plan de Separación de Naciones, que consiste en concentrar al millón y medio de palestinos con ciudadanía israelí en una zona de Galilea y el desierto del Neguev. Así se lograría “la homogeneidad étnica” del Estado sionista.

Lieberman, que se jacta de vivir en un asentamiento ilegal en Cisjordania, pretende privar de la ciudadanía y del derecho al voto a los palestinos de Israel; sus diputados han logrado que se voten varias leyes en ese sentido. También propuso “colocar frente al pelotón de fusilamiento” a los diputados palestinos con ciudadanía israelí que repudiaron la masacre en Gaza. Es partidario de atacar Teherán y en varias ocasiones propuso inundar Egipto, bombardeando la represa de Asuán (la negativa de Ariel Sharon precipitó su renuncia al gabinete en 2002). Ante la liberación de 350 presos palestinos, Lieberman, entonces ministro de Transporte de Sharon, ofreció ocuparse de su traslado para “ahogarlos, de ser posible en el mar Muerto, ya que ése es el punto más bajo del mundo”.

Después de las elecciones de 2009, Lieberman, con 11 diputados, obtuvo cuatro ministerios en el gobierno sobre la base de un acuerdo secreto con Benjamin Netanyahu, que incluye derrocar a Hamas y construir 3.000 nuevas casas en las colonias sionistas en Cisjordania. El 2 de abril, Lieberman, reiteradamente vinculado con la mafia rusa, fue interrogado como sospechoso de soborno, fraude, abuso de confianza, lavado de dinero y falsificación de documentos públicos.

A qué viene

El viaje de Lieberman a Argentina, Brasil, Perú y Colombia forma parte de una  avanzada sionista en América latina, que en las últimas semanas incluyó la presencia de varios ministros de Netanhayu en Panamá, Costa Rica y ¡Honduras! Shimon Peres vendría en noviembre. Tel Aviv subraya el tenor político del viaje: el canciller viene a “construir amplias alianzas regionales con el objetivo de expandir la influencia de Israel y a fortalecer los intereses israelíes en América latina”.

Lieberman “piensa abordar la teoría de la infiltración iraní en la región”, en particular “los cercanos vínculos que Hugo Chávez y Evo Morales han construido con Teherán”.  En junio, Israel los acusó de “estar abasteciendo a Irán para su programa nuclear”. Poco antes, Colombia afirmó haber destruido un circuito de narcotráfico y lavado de dinero sospechado de enviar fondos a Hezbollah (Haaretz, 20/2). Esto ocurre mientras el Congreso yanqui acusa a Chávez de haber convertido a Venezuela en un narcoestado y el jefe del Comando Sur, James Stavridis, dice que Hizbollah “participa en el tráfico de drogas a través de la frontera colombiana”. Más claro agua: Lieberman viene a apuntalar el ataque imperialista contra Chávez y Morales. También a reforzar la ingerencia militar norteamericana en la región: Lieberman “discutirá la situación en la Triple Frontera”, en consonancia con el último informe sobre terrorismo global del Departamento de Estado, que insiste en que el “laxo control” de Brasil, Argentina y Paraguay “ofrece refugio a extremistas islámicos y, en particular, a Hezbollah” (ídem).

El embajador israelí en Buenos Aires, Daniel Gazit, agregó que también explicará “las condiciones del conflicto que Israel mantiene con los palestinos” (AJN, 19/7). Una alta funcionaria, Dorit Shavit, dijo que, en Colombia, Lieberman y Uribe “hablarán de los procesos de paz vividos por ambos países”. ¿Qué procesos de paz? ¿La masacre de campesinos en Colombia y de palestinos en Gaza?

Lieberman viaja con empresarios en los campos de alta tecnología, telecomunicaciones y agricultura. En la Argentina, la UIA y la Manufacturerse Association de Israel firmarán un convenio de cooperación bajo el paraguas de la ley 26.437, promulgada por el gobierno kirchnerista en enero, mientras Israel aniquilaba Gaza. La ley promueve “la cooperación económica, industrial, tecnológica y comercial” entre ambos países con el compromiso de “no transmitir, sin la aprobación escrita de la otra Parte, las informaciones concernientes a los resultados obtenidos de los Programas Cooperativos” (Prensa Obrera Nº 1.071).

En Brasil, Lieberman definirá con Lula “la puesta en práctica del acuerdo de libre comercio con el Mercosur, firmado en 2007, pero aún pendiente de aplicación”. El tratado no distingue entre productos israelíes y productos de las empresas israelíes implantadas en los asentamientos, que roban la tierra y el agua palestinas. El Tratado convierte al Mercosur en cómplice y financista de la ocupación ilegal sionista del territorio palestino.

Los acuerdos comerciales son sólo el telón de fondo de los acuerdos políticos. Sólo sirven para sostener y legitimar a los verdugos del pueblo palestino.

Fuera el carnicero Liberman de la Argentina.

No al Tratado Israel-Mercosur

Apoyo incondicional al pueblo palestino.

Olga Cristóbal