EXCLUSIVO DE INTERNET | PTS: Reivindica a la burocracia de los gráficos

Con sorpresa y hasta estupor, los gráficos y luego todo el plenario de Indugraf, escuchamos la caracterización del PTS de que la burocracia gráfica “giró” (dio un viraje) como resultado de la gran lucha de Indugraf. No logramos saber cuál sería ese ‘giro’, ya que los burócratas estuvieron ausentes del festival y el plenario, las dos grandes iniciativas de lucha de Indugraf; cancelaron la miserable ayuda al fondo de lucha que dieron en algún momento. Después de acompañar la propuesta patronal de vender máquinas para pagar sueldos atrasados no hicieron ninguna otra (al unísono con la patronal que tampoco tiene propuesta que no sea el desalojo). Tampoco, por supuesto, convocan el plenario de delegados que reclama Indugraf; al contrario, han sacado toda presencia de delegados ligados o influenciados por ellos que se produjo en la primera etapa, por caso de MG, ex Talleres Unión, etc.

En este punto fue demoledor el testimonio de un obrero de Indugraf en el importante plenario gráfico previo a la reunión general del sábado 31 de enero: un alto dirigente les dijo a un grupo de obreros convocados por el sindicato que “están haciendo mucho quilombo, por lo que se ve, porque como cien delegados del gremio llamaron para ver qué pasa en Idugraf y qué hay que hacer”. Como resultado de las llamadas ajustaron las clavijas para borrar toda presencia “verde” en el conflicto. Un grupo de jubilados disidentes de la Lista Verde acaba de denunciar que están entregando la lucha de Indugraf como entregan cada lucha del gremio.

La teoría del “giro” (viraje) es un delirio, pero sería relativamente inofensiva si no entrañara una orientación vieja, tan vieja como el morenismo: aquella que pretende “embretar” a la burocracia, para “que se ponga a la cabeza” de lo que no quiere y que disfraza de conquista cada maniobra de la burocracia sindical. Ese fue el caso tan reciente en el Smata Córdoba, donde festejaron el “triunfo” de que la burocracia se “puso al frente del reclamo de los contratados”, los que están siendo despedidos criminalmente, en forma masiva, no sólo en Renault o VW, sino especialmente en Iveco, donde habría ocurrido la victoria de que “el Smata se puso al frente”.

La maniobra del sindicato que encandiló al PTS en Indugraf habría sido, según conjeturamos, que en un acta reciente del Ministerio avalan el pedido de la fábrica de todos los salarios caídos, etc., algo que siempre hizo y hace la burocracia en todos los conflictos. El ongarismo, como cualquier otra burocracia, “avala” el reclamo pero entierra la lucha por él, viabilizando el planteo patronal.

Tal vez crean que sea un giro un volante-contrabando, clásico para “la gilada”, donde hablan de la lucha como si tuvieran algo que ver y pretextan apoyar un futuro “cooperativo”. Para esto hay que derrotar el intento de desalojo de la Justicia, la propuesta de vender las máquinas que pergeñó la patronal y apoyó el sindicato, movilizar las fuerzas obreras, sociales y políticas que hoy sostienen la lucha y le permiten avanzar. Cada paso se ha hecho contra la burocracia.

El plenario de los “400 delegados del gremio en la puerta de Indugraf”, como lo reclama el Cuerpo de Delegados y la asamblea de la fábrica en lucha, tendremos que construirlo de manera autoconvocada, como el sábado 31, cuando se juntaron casi 20 fábricas gráficas de la mano de la Naranja y de Indugraf en la campaña que vuelve loca a la Comisión Directiva. Está por verse qué política prepara el PTS a partir de esta caracterización ficticia del “giro”.