Políticas

13/2/2020

Felipe Solá junto a Bolsonaro apoyó a los golpistas venezolanos

Luego de reunirse en Brasilia con Jair Bolsonaro y su canciller Ernesto Araújo, Felipe Solá realizó declaraciones para tomar nota. Ante la consulta de una periodista carioca sobre la posición de Argentina acerca el gobierno venezolano, respondió que “nosotros no somos favorables a Maduro. Somos favorables a la democracia al igual que Brasil” (Infobae, 12/2).


Escoltado por el embajador Daniel Scioli, el canciller argentino agregó que “nuestro objetivo es que en Venezuela haya elecciones totalmente limpias y que sean controladas por todas aquellas instituciones del mundo que sean capaces de garantizar las elecciones libres. Y que también puedan votar los venezolanos que están en el exilio, que son muchos” (ídem). De un saque, acusó a Maduro de ensuciar elecciones y de exiliar opositores, y reclamó de forma solapada la injerencia de la OEA, que con un escandaloso dictamen tras auditar las elecciones bolivianas brindó un preciado respaldo internacional en el momento del lanzamiento del golpe de Estado.


A coro, Araújo reforzó que tras la reunión podía afirmar que “coincidimos totalmente en el objetivo de contribuir a que haya una transición democrática en Venezuela”. Vale recordar aquí que, además de ser uno de los principales operadores en favor de la presión yanqui sobre el país caribeño, el canciller de Bolsonaro colaboró con el fascista boliviano Luis Fernado Camacho, a quien recibió en mayo del año pasado en plan campaña contra la candidatura de Evo Morales. Al producirse el golpe, Bolsonaro saludaba en su cuenta de Twitter “Buen día”, y Araújo era de los primeros en reconocer a Jeanine Añez como presidenta de Bolivia.


Para coronar este alineamiento exterior del gobierno de Alberto Fernández, Solá confirmó presencia en la reunión del proyanqui Grupo de Lima que se realizará en Canadá el 20 de febrero, cuyo punto excluyente será brindar apoyo a Juan Guaidó, quien participaría del propio cónclave.


El gobierno de Alberto Fernández ha llegado al poder con el apoyo de corrientes políticas que se reivindican chavistas, que aportaron funcionarios y legisladores. Su integración al Frente de Todos las ha colocado junto al campo del golpismo en Venezuela y de la ofensiva imperialista en América Latina. El silencio que las fuerzas “bolivarianas” guardan frente a estos hechos confirma que se trata de una capitulación.


El rumbo de sometimiento al FMI y el pago de la deuda externa usuraria conlleva la subordinación a los planes de Trump y el imperialismo.