Políticas

7/10/1993|403

Fraude electoral contra el Partido Obrero del Chaco

El PO chaqueño no sólo fue privado de su personería federal y de la provincial, sino que aun en el único rubro que pudo participar (municipio de Resistencia), fue objeto de una maniobra política proscriptiva.


La Junta Electoral no incluyó al PO en los partes de correo ni en los certificados de escrutinio. Al denunciar esta situación el 3/10 a las 9.30 horas, la prosecretaria de la Junta Electoral nos aseguró que estábamos incluidos en las Actas Oficiales de cada mesa, agregados con un sello (situación parcialmente cierta).


Dado que en los certificados no figurábamos, numerosos presidentes de mesa se negaban a incluir nuestros votos en los cuartos oscuros, y en los lugares que se incluían, al no figurar en el parte de correo, no ponían los resultados.


En las mesas que pudimos fizcalizar, se nos incluyó a mano, y también en otras que no fiscalizamos. Pero por lo menos en una quinta parte de las mesas no se llenaron los datos de las Actas Oficiales, sino solamente los certificados de escrutinio donde no estábamos incluidos.


El centro de cómputos nos adjudica un total de 293 votos, pero en las 8 escuelas que fiscalizamos (sobre 48) ya obteníamos 90 votos.


Hoy, 6/10, comenzó el escrutinio definitivo. No se nos aceptaron denuncias. No se nos permitió revisar las Actas Oficiales (para poder detectar en cuántas mesas hubo irregularidades). Y uno de nuestros apoderados fue retirado por Gendarmería en el momento de plantear su denuncia, por orden de uno de los vocales de la Junta.


Todo esto se suma al hecho de que en varias mesas nuestras boletas no estaban en el cuarto oscuro, y los encontrábamos “cajoneados” por las autoridades de mesa.


Por supuesto, no hubo ninguna solidaridad por parte de ningún partido.