“Es un mecanismo que usa la directiva del INTI para desviar fondos del ámbito público, donde debería haber algún tipo de control, para llevarlo a un ámbito privado donde disponen del dinero de manera discrecional –denuncia Luciano Domínguez Pose, secretario general de la Junta Interna del instituto, a Prensa Obrera–. Se trata de una estafa a las arcas del Estado”. 

El movimiento de fondos fraudulento fue detectado por los trabajadores al comprobar que la Disposición del Consejo Directivo 007/19, firmada por el presidente Javier Ibáñez, permite el retiro del circuito de fondos públicos de 14 millones de pesos y lo asigna a la Fundación Saber Cómo, donde el gerente general del INTI Mariano Zlatanoff figura como tesorero. El desvío de los fondos a la fundación privada. Según los objetivos que manifiesta en su página web, la Fundación Saber Cómo tiene como objetivo principal promover “el intercambio de información y publicaciones sobre servicios e investigaciones, libros, cursos de formación, bibliografía, seminarios y otros materiales de interés”. Es decir, se trata de una tarea que debería realizarse en el ámbito de la institución tecnológica estatal.  “Es una fachada que le permite a las autoridades disponer de fondos públicos según su criterio”, señala Domínguez Pose.

Según información recopilada por los trabajadores, “a través de la Fundación Saber Cómo los funcionarios han contratado, a través de los últimos años, a más de cincuenta ‘asesores’ monotributistas con salarios que llegan a $84.000, muchos de ellos ex socios tanto de Zlatanoff o del presidente Ibañez. Todo esto en contraste con el despido de 258 auxiliares, técnicos y profesionales altamente calificados del Instituto en 2018, del cual Zlatanoff fue firmante”. El desvío de fondos podría constituirse como el delito de asociación ilícita.

“El INTI tiene un presupuesto de alrededor de 2200 millones de pesos por año, pero los trabajadores no tenemos ningún tipo de información sobre los destinos de esos fondos –agrega Domínguez-. Por eso reclamamos que se abran los libros contables para conocer el manejo que se hace de esos dineros públicos”.

A la vez, los empleados de la institución tienen la carrera congelada y por eso mismo reclaman aumentos salariales. “Mientras despedían a personal calificado, por fuera contrataban asesores de dudosa capacidad técnica y que no concurren a los puestos de trabajo. Tenemos la carrera laboral congelada y ese dinero se está desviando para otro lado. Este congelamiento representa un daño muy fuerte en el salario  ya que hay más de 600 recategorizaciones paradas y además atenta contra todos aquellos que se encuentran llevando adelante trámites jubilatorios, ya que los montos correspondientes no pueden ser computados en el cálculo de su futura jubilación. Demandamos el descongelamiento de la carrera y aumento salarial”.

Los trabajadores también señalan que el caso de la Fundación Saber Cómo no es el único en el que se ha comprobado el desvío de fondos: “La usina de recursos redireccionados de Cambiemos no solo se nutre de esta Fundación: las contrataciones directas de empresas sin licitaciones debido a ‘urgencias’ -por montos millonarios- son un modus operandi: así le han renovado un contrato a la empresa de seguridad privada MURATA por $18 millones por solo 6 meses, siendo ésta una de las implicadas en el escándalo por los aportantes truchos a la campaña de Vidal en Cambiemos. O vale mencionar también el alquiler de tres carros de golf por 6 meses, por casi $1 millón, donde solo se presentaron dos empresas, y una de ellas era una casa de baterías de CABA, sin ninguna experiencia en el tema”.

El desvío de los fondos debe ser investigado por la justicia mientras se abren los libros contables para conocer el destino del presupuesto de la institución, mientras se descongela la carrera y se le otorga un urgente aumento salarial a los trabajadores.

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