Por pedido del intendente Villordo, el gobierno nacional mantiene un destacamento de más 200 gendarmes en la bajada de la Calle España de la Autopista La Plata- Buenos Aires.

 

El 1° de marzo, mientras Kirchner inauguraba las sesiones del Congreso, varias patrullas de Gendarmería, con más de 200 efectivos, carros hidrantes y perros, desalojaban una pacífica protesta de un centenar de vecinos de Quilmes Este, que trataban de impedir la colocación de un alambrado en la nueva bajada de la autopista, el cual dividiría al barrio en dos.

 

La movilización contra la división del barrio había comenzado en enero. Inicialmente, les mandaron a la Policía; luego a la Gendarmería. Pero los vecinos siguen manifestando día por medio frente a la Gendarmería.

 

Según la Constitución, la Gendarmería debe cuidar las fronteras. En Quilmes la Gendarmería cuida la frontera entre los intereses de los trabajadores que habitan los barrios populares, y los capitalistas -en este caso, los dueños de las empresas contratistas de las obras públicas, para quienes trabaja el kirchnerista Villordo.

 

Reclamamos el control obrero y vecinal de las obras públicas, para que sean en beneficio de los vecinos y no para su castigo. Que se abran los libros contables del Municipio para que los quilmeños sepamos el verdadero costo de las obras.

 

Fuera la Gendarmería de Villa Luján. Fuera Villordo y su patota.

 

Pongamos en pie, en Quilmes y en todo el país, una alternativa obrera y socialista.