Políticas

1/8/1996|504

“Fuera Menem-Cavallo”

“Fuera Menem-Cavallo” es la consigna que caracterizó al PO entre las corrientes de izquierda. No era un simple slogan y no tenía nada de abstracto ni ultrista.


En el Balance de las elecciones del 14 de mayo (junio de 1995) caracterizábamos —en el momento de mayor euforia burguesa por el triunfo electoral menemista— “que sigue vigente la consigna de conjunto ‘Fuera Menem-Cavallo’, no importa las conclusiones que los encuestadores o los constitucionalistas (o el Pts y el Mas) saquen de las elecciones. En tanto la crisis se agrave; en tanto la cesación de pagos no cese; en tanto la situación económica del cono sur siga empeorando; en tanto la miseria de las masas aumente geométricamente; en tanto la propia burguesía se cuestione la conveniencia del ‘plan’ actual, y en tanto el régimen político en vigencia no sea capaz de encontrar una salida; en tanto prevalezcan estos factores de conjunto, nuestra consigna será ‘Fuera Menem-Cavallo’, que es la consigna de la ‘tercera vuelta’, de luchas crecientes contra la explotación capitalista”.


La caída de Cavallo es una victoria de la lucha de las masas. Cavallo tuvo que ser destituido aun cuando era considerado por todas sus fracciones como un héroe de los capitalistas. Porque su permanencia se había convertido —en la actual situación de crisis y de crecientes levantamientos populares— en un grave peligro para la burguesía.


Lo voltearon Tucumán, Cutral Co, Transportes del Oeste, los desocupados de La Matanza, luego de los santiagueñazos y rionegrazos. El gobierno no pudo esperar: la destitución incluso se dio simbólicamente, con el trasfondo de una movilización convocada por los sindicatos a la Plaza de Mayo y con la amenaza de un paro general para el 8 de agosto.


La burguesía necesita maquillar la caída de su ‘héroe’ . Pero no puede ocultar la derrota completa de ‘su’ política y la creciente presencia de las masas trabajadoras en la calle. La burguesía nos quiere engañar, pero no se autoengaña: la caída de Cavallo abre un desequilibrio en su poder por un largo período. Que los trabajadores debemos aprovechar.


“Fuera Menem-Cavallo” fue una consigna estratégica de nuestra lucha política. Media consigna se ha consumado. En la lucha por sus reivindicaciones, la clase obrera tendrá la oportunidad de organizarse para hacerla realidad en su totalidad.