GRIPE A | Tribuna Docente en la lucha frente a la crisis sanitaria

La crisis sanitaria explotó como una bomba el 29 de junio. De pronto, pasa Nación. El 21, bajo el título “Asambleas en cada escuela para exigir las medidas que eviten contagio y muertes de alumnos y docentes”, Tribuna Docente repartió masivamente una declaración en la provincia de Buenos Aires, en la que planteábamos que se realicen “asambleas de escuela con docentes y padres, en todas las escuelas afectadas por casos de enfermedades altamente contagiosas, que se elabore el listado de reclamos (más personal de limpieza, desinfectantes, campaña de vacunación o medicaciones pertinentes, etc.), y se exijan las medidas que permitan evitar una mayor oleada de contagios (desinfecciones, cercos sanitarios, suspensión de clases, etc.).

Ante la falta de respuestas y el ocultamiento cómplice de parte del Suteba de Yasky y Baradel (que pedían a los docentes que siguieran las instrucciones de las autoridades de epimediología, las mismas que ocultaron la situación hasta el 29 de junio), Tribuna trabajó masivamente un petitorio desde el 25 de junio en el que reclamábamos “al gobierno, para evitar contagios entre nuestros alumnos y la comunidad educativa, la declaración de la emergencia sanitaria de la provincia con suspensión de las clases en nuestras escuelas”.

Cuando el 29 de junio el gobierno abrió la caja de pandora, Tribuna fue un factor clave en la movilización docente que le impuso al gobierno de Scioli y de Macri la suspensión de clases.
En Sarmiento, luego de una asamblea masiva, fuimos parte de la ocupación del Consejo escolar por casi siete horas, hasta arrancar la suspensión de clases en los distritos de San Miguel, Malvinas y José C. Paz. Mientras se ocupaba el Consejo, el Suteba central y el gobierno de Scioli discutían en La Plata. En el curso del día pasaron de negar la suspensión de clases a implementarla oficialmente desde el 6 de julio.

La noticia de la movilización de Sarmiento se extendió por toda la provincia.
A partir de entonces, por la movilización de padres y docentes, se cerraron escuelas en Marcos Paz, hasta que el intendente suspendió las clases. En Merlo hubo asambleas con padres en varias escuelas. El patotero Othahacé les cerró las puertas, pero desde el día siguiente las clases se suspendieron. También se forzó la suspensión de clases en Vicente López, San Isidro y Tigre.

También hubo reuniones, asambleas, maniobras del gobierno y de la burocracia, pero en todos los casos una fuerte movilización, en Matanza, Escobar, Tres de Febrero, Moreno, Lomas de Zamora y, por supuesto, en La Plata (véase nota). Todo ese proceso de lucha tuvo un protagonista de primera línea en la actividad de Tribuna Docente.

Claramente, el gobierno corrió detrás de estos acontecimientos.

A lo largo de estas jornadas de lucha, se evidenció el caos del Estado capitalista para hacer frente a esta situación, que él mismo potencia, y se vio a un cuerpo de funcionarios desorientado, quebrado y enfrentado entre sí.

La salida la darán los comités de crisis que encabecen y dirijan los trabajadores y sus organizaciones.

Vamos por ellos.

Daniel Sierra