Políticas

5/12/2021

Ajuste previsional

¿Habrá bono de fin de año para los jubilados?

Declaraciones contradictorias de los funcionarios del gobierno.

Plenario de Trabajadores Jubilados de Córdoba

La vocera presidencial, Gabriela Cerruti, afirmó que no habría bono previsional de fin de año, pero 24 horas después Fernanda Raverta, titular de Anses, dijo que aún se está estudiando. En medio de la pulseada hay siete millones de jubilados y pensionados expectantes.

Los millones de jubiladas y jubilados con haberes por debajo de la línea de indigencia deben tener muy presente el anuncio de un bono adicional, trascendido desde la presidencia luego de la derrota del oficialismo en las Paso. Con el aumento trimestral de setiembre tal bono no se hizo efectivo, y ahora tenemos una aparente disputa en la cúpula del gobierno sobre la posibilidad de su otorgamiento.

Con la confirmación del aumento del 12,11% en los haberes de diciembre, la jubilación mínima quedará en $29.061,63, mientras que la PUAM llegará a $23.249,30. Son niveles paupérrimos y de indigencia para millones de adultos mayores, que esperaban ese bono como un paliativo cuando la canasta de las fiestas se dispara y se les aleja. Hoy la Canasta Básica para Adultos Mayores se estima en $75.505. lo que pone dramáticamente en evidencia la caída en el poder adquisitivo de los haberes jubilatorios.

Los bonos otorgados hasta ahora no modifican la gravedad de esta situación, porque son por única vez y no se integran al haber, además de que no abarcan a todos los beneficiarios. Es probable que desde Anses, que tiene bajo su órbita mas de 5.000 centros de jubilados en todo el país, se esté registrando el crecimiento de la bronca entre los jubilados por este cuadro de miseria, y traten de poner paños fríos para bajar la temperatura social.

Por eso, la posibilidad de que el otorgamiento de un bono de fin de año no significa que el gobierno pegue un giro en su política previsional, que está en plena sintonía con el FMI. Los derechos previsionales son considerados un “gasto social” que hay que reducir, según la voz de mando del poder financiero mundial. De este modo el haber previsional ya no sería un salario diferido que las y los trabajadores perciben luego de una vida de trabajo y aportes, sino que quedarían reducidos a una pensión a la vejez desvinculada del salario que las y los trabajadores percibían en su fase activa. En nuestro país, en kirchnerismo, el macrismo y ahora los Fernández “lograron” que la jubilación de los argentinos sea ya esté en niveles de una miserable pensión.

Los actuales gobernantes nac&pop no cuestionan que los empresarios se “la lleven en pala” mientras ajustan hacia abajo tanto a las y los jubilados como a quienes están en actividad, y generan con su trabajo la riqueza que otros se apropian.

Se mire como se lo mire, es evidente que esta situación insoportable para las masas trabajadoras no puede continuar. En un país que supuestamente se caracterizaba por la “movilidad social ascendente” tenemos hoy un derrumbe social en el que más del 50% de la población es pobre. Martín Fierro decía que no hay mal que dure 100 años ni tiento que no se corte, pero no hay porque esperar tanto.

El próximo 11 de diciembre el Frente de Izquierda Unidad y numerosas organizaciones llaman a movilizarse a Plaza de Mayo y todos los centros políticos del país contra el Pacto del gobierno, oposición patronal y la burocracia sindical con el FMI. Una gran cantidad de organizaciones se sumaron a este llamado.

Es hora entonces que las y los jubilados y pensionados demos nuestro presente, organizando nuestra participación masiva en estos actos para expresar activamente nuestro repudio a tantos agravios y por la totalidad de nuestros reclamos, colocando en primer lugar un haber mínimo de $75.505.