El intendente de Pergamino, Javier Martínez (UCR-Cambiemos), sigue sin dar respuesta satisfactoria a los reclamos de los vecinos inundados. Las listas de damnificados confeccionadas por el Municipio sin la realización de un censo adecuado están plagadas de errores e inexactitudes: subsidios cobrados por gente que no se inundó, subsidios no cobrados por gente que sí se inundó, el ex intendente Héctor “Cachi” Gutiérrez figurando en la nómina y la aparición de personas fallecidas en el listado, entre otras irregularidades.

 

Ante esta situación, la Asamblea de Inundados Autoconvocados decidió realizar el viernes último —por segunda vez— un acampe en la Plaza Merced, frente al Municipio. Dicho acampe se levantó por decisión de los vecinos ante las amenazas que recibieron en horas de la madrugada del domingo por parte de personas no identificadas.  

 

Los vecinos rechazan la oferta inicial que varía entre 5 mil y 8 mil pesos (por única vez) y presentarán el jueves próximo, en una sesión extraordinaria del Concejo Deliberante, un proyecto de ordenanza en el que se exige el pago de 8 mil pesos durante seis meses, a modo de resarcimiento económico.

 

La responsabilidad del Estado, representado por este gobierno y por todos los que gobernaron desde la gran inundación del año 1995, es una caracterización en la que coinciden los damnificados.

 

Desarrollemos un programa de fondo para terminar con las inundaciones: desagües, limpieza de ríos y arroyos, cambio de la forma de producción agraria terminando con la siembra directa que lava los suelos y hace que aumente la napa acuífera, control por parte de los trabajadores y vecinos de las obras de urbanización y de la construcción de barrios privados que actúan como barreras para el agua, plan de contención del aumento de niveles y volúmenes de agua que coordine a todas las localidades de las diferentes cuencas.

 

Este planteo exige la organización independiente y de lucha de los vecinos.