Políticas

22/1/2009|1070

La burocracia de ATE revienta la lucha de Medio Ambiente

En el número anterior de Prensa Obrera, denunciamos el despido de 80 compañeros en la Secretaría de Medio Ambiente de la Nación. El Estado nacional incrementa la desocupación, desmintiendo las rimbombantes declaraciones de la Presidenta sobre la necesidad de “proteger el empleo”.

El secretario de Medio Ambiente es Homero Bibiloni, un abogado que vino a reemplazar a la contaminadora Romina Picolotti y ha ganado sus “medallas” defendiendo a empresas contaminantes del conurbano bonaerense como Diacrom, constantemente denunciada por el daño ambiental que provoca. No es casual entonces que los despidos hayan comenzado en las áreas de fiscalización e inspección de estas industrias.

Con el gastado argumento de los supuestos “ñoquis” y la expansión “innecesaria” de la planta del Estado y al mejor estilo Macri, Bibiloni planea una reestructuración política de la Secretaría en favor de los intereses de los empresarios del conurbano bonaerense y los intendentes cómplices.

Durante 15 días, bajo la iniciativa de la Junta Interna de ATE y en particular de su delegada general, Alicia Rodríguez, se libró una lucha contra las cesantías mediante asambleas, pronunciamientos, pegatina de afiches denunciando a Bibiloni, campañas en los medios y organización de una comisión de despedidos. El llamado de delegados y afectados a que la dirección de ATE apoyara la lucha fue totalmente estéril. No aparecieron por el organismo, no emitieron un miserable comunicado.

En cambio, pasadas dos semanas de conflicto, de la noche a la mañana y en el momento de mayor tensión, una comisión autodenominada “normalizadora”, integrada por miembros de la dirección de ATE Capital, se presentó para informar a la delegada general, democráticamente electa hace dos años por los trabajadores de la Secretaría, que a partir de ese momento la dirección del sindicato había decidido “relevarla” de sus funciones, y dejar sin efecto todas las medidas que conformaban el plan de lucha. Esto sin ninguna resolución escrita de ningún organismo del gremio y sin ninguna consulta a los trabajadores del organismo ¿Con qué argumento? ¡Que la delegada había convocado a una asamblea de trabajadores antes de reunirse con la patronal! ¡Que la delegada había denunciado a Homero Bibiloni en el diario Crítica! ¡Que ellos opinaban que el conflicto no estaba “bien dirigido”!

En lugar de venir a apoyar a la Junta Interna que encabezaba la resistencia a este ensayo de despidos masivos en el Estado, vinieron a “intervenir” y a tomar en sus manos las tratativas con la patronal. Advirtieron a los despedidos que “no les prometemos nada, porque la situación está muy difícil”.

Vinieron como bomberos, a evitar la lucha de los trabajadores por sus puestos de trabajo. Responden por entero a los intereses que vino a defender Bibiloni y al gobierno K que lo nombró.

Alicia Rodríguez emitió un comunicado rechazando la intervención, reivindicando los pasos de lucha que se venían cumpliendo y colocándose a disposición para continuar la pelea por la reincorporación de todos los cesantes; por el rechazo a Bibiloni y su política; por la apertura de la discusión salarial y el pase a planta permanente de todos los contratados.

Corresponsal