Políticas

6/6/2002|757

La conspiración del MST en las Asambleas Populares

La Comisión de Prensa y Difusión de la Interbarrial de Parque Centenario ha producido un informe riguroso y circunstanciado de la conspiración del MST (IU) en el seno de las Asambleas Populares en relación al acto del 1º de Mayo. Los integrantes de la Comisión advierten, de entrada, que se intentó una tarea de vaciamiento de la Comisión de Prensa por parte de un integrante de la Mesa Coordinadora de las Asambleas Populares, presumiblemente ligado al MST, que anunció en forma pública la “autodisolución” de la Comisión a partir de sus “errores”, “errores” que no han sido objeto de debate ni en las Asambleas ni en la Interbarrial.


El informe está firmado por los cinco miembros que integran la Comisión de Prensa desde su origen. Como ellos mismos lo dicen, se hicieron cargo de “una tarea pendiente de enorme importancia estratégica, como es la recopilación, ordenamiento y publicación de todas las resoluciones de todas las Interbarriales de Capital Federal y Gran Buenos Aires desde el 13/1 hasta el 14/4 y de la Interbarrial Nacional del 17/3”.


“Adulteración”


La Comisión califica de este modo a la violación del mandato establecido por la Asamblea Interbarrial Nacional.


Esta había votado:


“1º de Mayo, Movilización y acto donde hablen las Asambleas Barriales, organizaciones estudiantiles, trabajadores ocupados, desocupados y organizaciones de DD.HH.”.


Pero la resolución dada a conocer en los días previos al 1º de Mayo dice:


“1º de Mayo, movilización a Plaza de Mayo y Acto de las Asambleas Barriales, organizaciones estudiantiles, trabajadores ocupados, desocupados y organizaciones de DD.HH.”.


Como se puede apreciar, se introdujeron (supresión mediante) dos cambios. Uno, para borrar la expresión “donde hablen”, que planteaba un acto con oradores de las distintas vertientes convocadas. Otro, para establecer que el acto debía hacerse en Plaza de Mayo, algo que no figuraba en el original. Esta política se expresó en el planteo de un “documento único” que suplantara de la tribuna a los oradores obreros, y en la lucha facciosa por ocupar la Plaza de Mayo contra las organizaciones piqueteras, explotando el nombre de las Asambleas Populares.


La conspiración comenzó el 17 de marzo


Esta adulteración ya era conocida, hasta cierto punto, por un sector del activismo de las Asambleas Populares y ocultada por el bloque de hecho entre el Frenapo e IU. Lo novedoso del documento de la Comisión de Prensa y Difusión de la Interbarrial es que saca a la luz la trama de la conspiración. La Asamblea Interbarrial Nacional había fijado una dirección de e-mail para la Coordinación de la Asamblea misma, abierta a los asambleístas, cuya clave de acceso (password) era de dominio público. El 18 de marzo, un día después de la Asamblea (Nacional) de Asambleas, “a esa dirección llegaron dos versiones de las resoluciones, una de ellas emitida por la Mesa Coordinadora, que coincide con la versión grabada, y otra emitida por el MST, que contenía dos modificaciones. Por un lado, suprimía las palabras ‘donde hablen’ y, por otro lado, borraba íntegramente la declaración de principios propuesta por la Asamblea de Parque Lezama, que fuera aprobada por abrumadora mayoría en la Interbarrial Nacional” (Informe de la Comisión de Prensa y Difusión). Apoyándose en su propia versión trucha de las resoluciones de la Interbarrial, el MST hizo aprobar un afiche del acto con la convocatoria adulterada. “Los miembros de la Comisión… que debían dar el visto bueno final, aceptaron de buena fe lo indicado por esta vecina, por lo que hacen una autocrítica pública, al no haber revisado en ese preciso momento los documentos originales en este punto”, reconocen los autores del Informe. La ejecutora de esta “operación” integra el Comité Central del MST, y se ha hecho conocer como vecina perteneciente a la Asamblea de Medrano y Corrientes.


La continuidad de la trama


Aún así existía la posibilidad de un acto en el que se leyera un “documento único”, pero hablaran los representantes de las organizaciones piqueteras y en lucha. A instancias de IU comenzó a convocarse una reunión de delegados de Asambleas, que constituye el primer paso en la liquidación del funcionamiento asambleario de las Asambleas Populares. En una de estas reuniones de “delegados”, con la presencia de representantes de sólo 29 de ellas, se votó un acto de “documento único y sin oradores”. La Asamblea Interbarrial Nacional, sin embargo, con la presencia de 150 asambleas y 4.000 asambleístas había resuelto un acto junto al movimiento de lucha piquetero. La reunión de delegados debió ser denunciada y debió rechazada la votación en su seno de un mandato que violaba la deliberación nacional de las Asambleas.


La Comisión de Prensa y Difusión denuncia que, sin su conocimiento, “el martes 30 de abril aparecieron grandes avisos en Página/12 y afiches en la calle, anunciando el acto en el Obelisco en nombre de las Asambleas Populares”, los cuales “jamás se hubieran podido financiar con los recursos de la Interbarrial”.


Golpe de Estado contra las Asambleas Populares


Quien se tome el trabajo de analizar lo ocurrido puede advertir una operación política que excede la conspiración frente al 1º de Mayo. Se ha impuesto el funcionamiento restringido de las Asambleas Populares a través de delegados, una decisión que está en la línea de disolución de esta organización popular e implementada de manera tan brutal que rige el criterio de un delegado por Asamblea, independientemente de la cantidad de vecinos participantes y sin verificación fehaciente. No casualmente, esta decisión fue articulada por un bloque de fuerzas en el que confluyeron el Frenapo, el ARI e IU. Este golpe a la organización popular es saludado por el MST como “un importante paso adelante para que se exprese la voluntad de las asambleas” (¿¡) (Alternativa Socialista, N° 330, 15/5).


Los miembros “históricos” de la Comisión de Prensa y Difusión de la Asamblea Interbarrial han hecho un acto de saneamiento político.