Políticas

6/6/2002|757

La demagogia del “banderazo”

Que el patrioterismo no es sólo patrimonio de Néstor Ibarra (de Radio Mitre, del Grupo Clarín), lo acaban de demostrar IU y sus socios, “la CTA, CCC, Frente para el cambio, Patria Libre, Partido Socialista Auténtico”, entre otros convocantes el 24/5 a “un banderazo frente al Cabildo con el objetivo de retomar la idea de una nueva Revolución de Mayo” (Página/12, 24/5).


Lo que en otro momento habría sido una nueva muestra del oportunismo de la “izquierda que se une”, en la actual situación política se revela en toda su función histórica: el Frente Popular que se vale del patriotismo para disimular la colaboración de clases.


“El banderazo no fue muy nutrido”, describió Clarín (25/5) al patético suceso que no involucró a más de “unas 400 personas” (Página/12, 25/5). Entre los globos celestes y blancos, se enarboló de nuevo el “documento único” con que IU se manifestó el 1° de Mayo, ahora para reclamar “la suspensión (sic) del pago de la deuda externa, por recuperar el derecho protectorio del trabajo”, y por “impulsar una fuerte (sic) redistribución de ingresos” (Página/12, ídem).


Un verdadero retrato político de esta “izquierda”, pues el pago de la deuda ya se encuentra parcialmente “suspendido”; el capitalismo no puede “proteger” el trabajo, pues su función es explotarlo;¸con un capitalismo en quiebra, la redistribución de ingresos requiere antes despojar al capital de su dominación política y social.


Se trata de un programa que “protege” al orden existente, es por lo tanto contrarrevolucionario. Esta orientación estratégica explica la sistemática línea que sigue IU, de aliarse al ARI y a los legisladores de oposición.


Si desde este periódico advertíamos que “la demagogia nacionalista es un recurso fundamental contra las masas en lucha, porque su propósito es que éstas vayan detrás de la burguesía que la engaña con puros desplantes y ninguna acción ni organización” (Jorge Altamira, en PO N° 754), son las palabras de los propios protagonistas las que orientan hacia dónde conduce esa demagogia de los “banderoleros”: Farinello afirmó que “entre todas las fuerzas que vienen aquí hay muy buenas relaciones e incluso solemos votar juntos en el Congreso” (Página/12, ídem), o el más instructivo “referente de la izquierda”, como denominó Página/12, a quien dijo: “Debemos caminar juntos hacia un frente antiimperialista, que es lo que realmente necesita el país” (ídem), descontando el antiimperialismo del Polo Social, de Alicia Castro y del Frenapo.


Después del Argentinazo y de la experiencia que los trabajadores, la juventud, la clase media con referencia a “que se vayan todos” vienen desarrollando; la izquierda democratizante, como el escorpión de la fábula, no puede negar su “naturaleza”.