Políticas

11/7/2002|762

La jornada del 9 de julio en Tucumán

En contraposición a la movilización comprada del gobierno para recibir a Duhalde (se pagaba 10 pesos por concurrente), que reunió no más de 4.000 personas, se realizó en la Plaza San Martín una concentración de todas las tendencias piqueteras (a excepción del Mijp), la CTA, los partidos de izquierda, organismos de derechos humanos, etc., que reunió a más de 3.000 personas.


Esta convocatoria sustituyó una anunciada Marcha a Pata y Pulmón que era impulsada por las dos CGT (Regional y Sarmiento), la CTA y la CCC, como parte de un plan de lucha por diversos reclamos que afectan a los empleados públicos. En una nota anterior (ver PO N° 761) ya habíamos señalado que en este conglomerado de tendencias los reclamos apuntaban a una concertación social con el gobierno.


La jornada del 9 de julio dio lugar a un debate donde todos los agrupamientos, salvo el Partido Obrero, firmaron un documento a favor de la “segunda independencia” y por una salida patriótica, sustituyendo los reclamos que presiden todas las movilización populares a nivel nacional: Que se vayan todos, Fuera Duhalde y el FMI. Tanto la CCC como la CTA ya tenían la postura tomada de realizar un acto y no marchar (tampoco intentarlo) hacia Plaza Independencia. En la concentración se cantó el himno y se leyeron adhesiones. En ese marco, desde el Polo Obrero se llamó a marchar hacia la casa histórica y la Plaza Independencia, sumándose la agrupación Faro Ciudadano, Hijos, la APDH, IU, el PH y algunas agrupaciones de base de la CCC y desocupados de la construcción agrupados en el Sitracon. Se marchó hasta la Casa de Tucumán, donde se realizó un acto, que fue abierto por Daniel Blanco (del Partido Obrero) y fue cerrado por Florencia Costilla, del Polo Obrero, que llamó a organizar una campaña para convocar a un Congreso de Bases con delegados mandatados para discutir un plan de lucha unitario y de conjunto, que una la lucha de los trabajadores ocupados y desocupados y de los sectores de la clase media que nuevamente han comenzado a aparecer con sus cacerolas y asambleas para que se vayan todos. Finalmente se llegó hasta la Plaza, donde se desconcentró.