La lucha contra los tarifazos crece

Marcha de Congreso a Plaza de Mayo

La Marcha de Congreso a Plaza de Mayo convocada por la coordinación de Asambleas Populares contra los Tarifazos (jueves 5 de marzo a las 19 horas) ha venido precedida por movilizaciones crecientes.

Esas movilizaciones se han extendido desde el Gran Buenos Aires al interior de la provincia (2.000 manifestantes en un corte de ruta en Baradero, organizado en tiempo récord) y al NOA (Tucumán). En la Capital, están llegando las primeras boletas con el aumento en las tarifas de luz.

El jueves 19 de febrero, una marcha multitudinaria, convocada por más de cincuenta organizaciones (entre ellas el sindicato de Luz y Fuerza y el Centro de Estudiantes de Humanidades) recorrió el centro de Mar del Plata para exigir la nulidad de los aumentos en luz, gas y boleto del transporte. Luz y Fuerza exige también la efectivización de la masa de trabajadores precarios que revista en sus filas.

El viernes 27, en Moreno, una movilización de más de mil vecinos y trabajadores, convocada por la Multisectorial del distrito, marchó al Concejo Deliberante para exigir, además de la derogación de los aumentos y la prohibición de cortes de luz, una tarifa social para quienes están por debajo de la línea de pobreza (hoy en 988 pesos). El Concejo se convirtió en un edificio sitiado durantes varias horas sin que un solo concejal se atreviera a hablar con los manifestantes.

El mismo día hubo una movilización en La Plata, convocado por la Asamblea de Autoconvocados contra el Tarifazo. También reclamó contra el “boletazo” por “un boleto único a precio popular y por el aumento salarial para los chóferes de colectivos”.

En Florencio Varela, en la misma semana, una marcha de más de dos mil manifestantes conmovió el centro de la ciudad.

En zonas en las que el movimiento no había aflorado -San Isidro, Avellaneda- las asambleas populares han comenzado a hacerse sentir.

Un movimiento de lucha nacional

La lucha contra los tarifazos es, a esta altura, una lucha nacional.

En Tucumán acaba de concretarse la cuarta marcha (el mismo 27 de febrero), en medio de la algarabía popular por el fallo de un juez federal que obliga a Edet (distribuidora en el norte) a dar marcha atrás con el aumento. La Federación Económica (patronal) había resuelto no pagar las facturas y el Frente de Lucha contra el Tarifazo había aprobado el reclamo de un paro activo provincial. Ha habido un aumento del 12 al 15% en la tarifa del agua y aún más en el caso del gas. Se ha abierto una crisis política en el Concejo Deliberante, que ha paralizado, por ahora, el aumento del boleto de transporte.

La marcha contra el tarifazo sumó a una columna de más de 500 docentes agrupados en la UDT, que además reclaman de básico de 1.500 pesos.

En Mar del Plata, otro juez ha resuelto prohibir a Edea cortar la luz a los que no hayan pagado, lo miso que obtuvo la Defensoría del Pueblo en Capital.

Los agentes del gobierno y de las distribuidoras llaman a los vecinos a pagar las facturas sin los aumentos y a esperar una “reconsideración” de sus casos, para calmar las aguas. En algunos distritos, luego de “espera”, solo una pequeñísima minoría obtuvo una rebaja en sus facturas.

La consigna es ningún aumento

El aumento de la luz, del gas, del peaje, del agua se produce en el mismo momento en que miles de trabajadores (precarios y en negro, en primer lugar) están perdiendo sus empleos o “changas” y en el que las promocionadas obras públicas no aparecen o son absolutamente marginales.

Desde ya que los aumentos de tarifas no van a inversiones, sino a fuga de capitales o para el pago de la deuda pública.

Los aumentos de tarifas son parte del “ajuste” que se está negociando con el FMI. Con tanta exposición mediática a su favor, ni la Coalición Cívica ni el PRO ni la Mesa de Enlace de la soja han dicho una palabra sobre los aumentos de tarifas. Un proyecto de la Coalición Cívica, que propone “suspender” los aumentos y someterlos a la “reconsideración” por las empresas, es una cortina de humo.

Planteamos: derogación total de los aumentos en los servicios. Exención del pago para todo trabajador desocupado y jubilado. Asambleas populares en cada barrio para organizar la movilización popular. Que los sindicatos se pronuncien y actúen. Paros zonales, movilizaciones y cortes de ruta hasta doblar el brazo del gobierno y las privatizadas.

(Informes de Moreno, Tucumán, Mar del Plata y La Plata)