Políticas

19/5/2016|1411

La Patagonia Rebelde

Las respuestas que el Congreso no puede ni quiere dar a los reclamos populares, los trabajadores de la Patagonia han decidido buscarlas por sus propios medios


Foto: Jorge D. Riquelme


 


Las respuestas que el Congreso no puede ni quiere dar a los reclamos populares, los trabajadores de la Patagonia han decidido buscarlas por sus propios medios.


 


En Santa Cruz, la provincia gobernada por Alicia Kirchner, una masiva movilización de 10.000 trabajadores hizo una extraordinaria demostración en defensa del salario, las jubilaciones y el trabajo. Anunciaron nuevos paros de docentes y estatales para derrotar el ajuste de un gobierno corrompido hasta la médula.


 


En Tierra del Fuego, los trabajadores realizaron una nueva jornada de huelga general, cuando muchos gremios ya llevan más de 80 días de paro contra la contrarreforma jubilatoria y las paritarias a la baja del gobierno. 


 


Se trata de una derrota en toda la línea de la política represiva seguida por la gobernadora del Frente para la Victoria, Rosana Bertone.


 


En Chubut, los trabajadores de Comodoro Rivadavia realizaron días atrás la concentración más grande de la historia de la provincia, para enfrentar los


despidos de los monopolios petroleros.


 


Los trabajadores de la Patagonia rebelde saben bien a qué se enfrentan: el ajuste del gobierno de Macri es aplicado en sus provincias por los gobernadores del FpV y del kirchnerismo. 


 


Estas movilizaciones se enlazan con la que llevan adelante los universitarios, que ocuparon la Plaza de Mayo con miles de personas, con la juventud que pelea por el boleto, y con los trabajadores de la provincia de Buenos Aires que enfrentan el ajuste de Vidal. 


 


El valor de estas luchas es que ponen en cuestión quién paga la crisis: si los trabajadores o los capitalistas. 


 


Por eso no es casual que la burocracia sindical, agente de las patronales en el movimiento obrero, no movilice a los sindicatos en defensa de los trabajadores. 


 


Llamamos a seguir el ejemplo de la Patagonia rebelde, multiplicando las acciones de lucha para que la crisis la paguen los capitalistas.


 


Luchemos por estructurar una alternativa política de los trabajadores.