Políticas

1/8/2019

La transición en el Puerto de Buenos Aires

¡Impulsemos asambleas en todo el puerto para defender los puestos de trabajo y las condiciones laborales!

El proceso de licitación del Puerto de Buenos Aires se inscribe en un nuevo escenario de crisis a dos meses de la fecha indicada para la adjudicación de la única operadora que se hará con el botín del control de las operaciones del 60% del tráfico de exportaciones e importaciones del país por los próximos 50 años.


La misma fue retratada por los principales medios del país y consiste en la puja por la adjudicación de un negocio multimillonario, de características monopólicas y que ocupa un lugar estratégico en la política comercial del país y su metrópolis.


El derrumbe político del gobierno de Macri, sacudido por los efectos del ajuste descargado sobre la población trabajadora y el fracaso de su política económica, ha apuntalado las expectativas del peronismo que con Fernández-Fernández- Massa se anota como relevo del macrismo para llevar adelante la agenda del FMI: mayor devaluación, ajuste, reforma laboral y previsional, etc.


Las centrales obreras, mientras se multiplican las suspensiones y los despidos y los salarios se pulverizan con la inflación, profundizan la tregua con el gobierno.


El gobierno, que se ve acorralado, ha planificado todo el proceso licitatorio para adjudicar el negocio del puerto antes de una eventual derrota en las próximas elecciones. Esto ha llevado a que la oposición patronal, y principalmente el peronismo, impugne el procedimiento del traspaso del puerto, no en los marcos de una defensa de los intereses obreros, sino como contrapartida de la pelea por ubicar un empresariado afín a sus intereses en dicho lugar. Asistimos a una pelea de bandos capitalistas por el control de las operaciones del Puerto de Buenos Aires, que dicho sea de paso también daría lugar a un fenomenal negocio inmobiliario cediendo terrenos del puerto para la edificación del proyecto “Puerto Madero 2”.


Una salida para los trabajadores


Lo que la contienda omite es la situación de 1500 trabajadores portuarios que se ven amenazados por la imposición de peores condiciones de trabajo, el desconocimiento de los convenios por empresa, el aumento de la flexibilidad laboral, la consagración de la diferenciación entre trabajadores discontinuos y de planta, y los despidos hormiga que se suman semana a semana.


En este cuadro la diputada nacional del PO, y candidata en la fórmula presidencial del Frente de Izquierda-Unidad, Romina Del Plá recibió a una delegación de representantes sindicales de gremios portuarios para acercarles el apoyo de la bancada del Partido Obrero y ofrecerles nuestra colaboración en todo lo tendiente a defender la agenda de los trabajadores contra la reestructuración patronal del Puerto de Buenos Aires.


El proceso de licitación del puerto ha sido anunciado largamente e impulsado finalmente en diciembre del 2018. Las cámaras patronales y el gobierno han discutido finamente los mecanismos para consagrar un puerto dinámico para los empresarios. Tanto el actual interventor Gonzalo Mórtola como su eventual reemplazo serán tributarios de esta arquitectura patronal y antiobrera.


Para los trabajadores portuarios se vuelve inminente una profunda deliberación. Llamamos a impulsar asambleas por turnos y conjuntas de todos los portuarios independientemente de su afiliación sindical para discutir las reivindicaciones obreras. No se puede depositar un gramo de confianza en las patronales, debemos reclamar la garantía absoluta -sin fecha de vencimiento- de todos los puestos de trabajo, el pase a planta permanente de todo el personal, vigencia de los derechos adquiridos y de las cláusulas más favorables para el trabajador allí donde existan, cobertura de todos los puestos perdidos con nuevos ingresos, indexación de los salarios con la inflación, basta de aprietes y regimentación en el lugar de trabajo.


Rechacemos esta nueva privatización del puerto. Por la nacionalización del Puerto de Buenos Aires sobre la base de imponer la agenda de los trabajadores. Abajo el ajuste. Fuera el régimen del FMI. Que la crisis la paguen los capitalistas.