Las acciones de la Anses, en venta

Un vaciamiento con intención siniestra


El gobierno está a punto de lanzar la venta de acciones de empresas cotizantes en la bolsa en poder de la Anses. La instrumentación de la venta ha quedado en manos de Luis Blaquier, sobrino de Carlos Blaquier, dueño de Ingenio Ledesma, que es quien dirige el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) -un fondo de contingencia compuesto mayoritariamente por bonos del Estado, acciones, plazos fijos y otros instrumentos financieros que estaban en poder de las AFJP hasta 2010.


 


No por casualidad, el anuncio ha sido acompañado por la “filtración” de un diagnóstico que está considerando el gobierno. Allí se plantea que, sin considerar los aportes del Tesoro y el superávit del FGS, la Anses cerró 2015 con un déficit de 58.000 millones de pesos, agravado por la restitución del 15% de Ganancias a algunas provincias. La conclusión es que el sistema ha dejado de ser “sustentable” y es urgente una reforma del sistema de jubilaciones. El eje de lo que se intenta fue adelantado por el actual titular del organismo: “una nueva ley jubilatoria que contemple un haber mínimo, lo más universal posible, y luego una parte contributiva”. Donde se lee “haber mínimo” léase asignación asistencial.


 


En 2015, el gobierno CFK hizo aprobar una ley por la que se requieren las dos terceras partes de los votos de ambas cámara del Congreso para


aprobar la venta parcial o total de estas acciones. De este modo, el gobierno “nacional y popular” tendía una cortina de humo en el momento que dilapidaba los títulos públicos en poder del FGS, a la búsqueda de una baja de la cotización del dólar.


 


El gobierno especula, ante la actual demolición del peronismo, lograr los 2/3 necesarios para viabilizar el proyecto.


La nueva ofensiva sobre los fondos de los jubilados es inescindible de la búsqueda desesperada de fondos en la que está empeñada el gobierno Cambiemos. Al día de hoy, según una estimación de El Cronista, las acciones del FGS suman un valor de 60.000 millones de pesos.


 


Acuerdo


 


El gobierno tendría el acuerdo explícito de una serie de grupos capitalistas. Funcionarios de la Anses “estuvieron haciendo consultas con Siderar (grupo Techint, Paolo Rocca) para una hipotética oferta de recompra de acciones con resultados no asignados… lo mismo le ofrecieron al grupo financiero Galicia, mientras Telecom ya dio el primer paso con el lanzamiento de una Oferta Pública de Adquisición (OPA)” (4/4). La mirada está puesta, además, en “fondos muy activos en contacto con empresas que resurgieron para ofrecer comparar paquetes accionarios” (ídem).


 


La perspectiva es mucho más siniestra. En un encuentro con empresarios antes de la victoria del PRO, Francisco Cabrera, actual ministro de Desarrollo Económico, planteó que una alternativa era subastar el FGS “en pedazos”, para que entren fondos de pensión del exterior.


 


En todo caso, además de Macri, tanto Scioli, como Massa tenían en carpeta la reventa de estas acciones como recurso para hacerse rápidamente de dólares en caso de llegar a la presidencia.


 


¿Cómo deben hacerse las cuentas?


 


El vaciamiento de la Anses ha seguido sin pausa de un gobierno a otro. El FGS está compuesto en más de un 60% por títulos públicos y el pasivo omitido -en el que cuenta la deuda con los jubilados- según el informe de la Auditoría 2015 superaba el billón (un millón de millones) de pesos contra un patrimonio neto de 230.000 millones.


 


El punto de vista de los trabajadores exige explicar lo que ocurre y desenvolver un programa.


 


Planteamos: que la Anses sea manejada por representantes de trabajadores y jubilados, que sus fondos sean invertidos en función de asegurar el pago del 82% móvil, un piso equivalente al costo de la canasta familiar y un plan de industrialización y obras públicas prioritarias debatido por un congreso


de trabajadores.