La Comisión de Legislación General realizó ayer la segunda reunión informativa con el objetivo de debatir y analizar las modificaciones a la Ley de Alquileres (27.551), norma sancionada por el Congreso en 2020.

Allí se discutieron cerca de 30 proyectos sobre la reforma de la fracasada ley, en pos de implementar cambios en el sistema de actualización de contratos entre locadores y locatarios, que tendrían como presunto objetivo promover la oferta de inmuebles en alquiler ante la disparada de sus precios.

El interés de las inmobiliarias es modificar el artículo que estipula la duración de tres años para los contratos y el que indexa el ajuste anual por inflación e índice de variación salarial. Lejos de resolver la crisis, y mientras se agrava el déficit habitacional, los partidos patronales ceden al interés del capital inmobiliario por incrementar su renta en medio de una parálisis del mercado de inmuebles.

En este sentido intervino Lucas Martin Stevani, representante del Polo Obrero La Plata, para desarrollar la problemática de la imposibilidad del acceso a la vivienda de los sectores de trabajadores precarizados y desocupados que son obligados, por las condiciones de pauperización y miseria, a establecerse en asentamientos o a ocupar terrenos “los trabajadores desocupados y precarizados tenemos vedado un derecho constitucional como es el derecho a la vivienda, lo cual es un problema explosivo en nuestro país que posee un déficit habitacional de mas de 2 millones de viviendas”

Además, el dirigente agregó “tuvimos en la Provincia de Buenos Aires una lucha muy importante como fue la de Guernica, lo que sacó a la luz una situación que atravesamos muchos trabajadores en el país y es la imposibilidad de poder acceder a una vivienda, cosa que nos arroja cada vez más a la pobreza y a la miseria. Esto obliga a que los trabajadores se vayan de las ciudades para vivir en asentamientos o terrenos ocupados. En la Provincia de Buenos Aires hay miles de Guernicas”

Mientras el FMI reclama devaluaciones y el gobierno las utiliza para licuar los salarios y la deuda en pesos, la valuación en dólares de las propiedades va en franco descenso (producto también de la escasez de ventas). En este sentido, el capital inmobiliario se dedica a construir complejos lujosos, que en muchos casos quedan inhabitados, y funcionan únicamente como reserva de valor. Esta especulación eleva el precio del metro cuadrado, repercutiendo directamente en el precio que paga el inquilino. En este sentido, Lucas Stevani afirmó “mientras aumenta el hacinamiento, la precarización, la falta de servicios y la exposición a la contaminación en lo asentamientos, también ha crecido la especulación inmobiliaria (countries, megashopping, torres vacías, etc) y esto es un problema que se va a profundizar en tanto y en cuanto no haya una transformación de fondo”

Para cerrar, y en sintonía con el reclamo, el dirigente agregó “es fundamental, para la lucha por la tierra y la vivienda pero también para el resto de de las luchas, que nos organicemos de forma independiente, sin punteros, sin estar al servicio de ningún gobierno, porque todos han llevado adelante esta política de ajuste contra los trabajadores. Por lo tanto, refrendamos y exigimos al Congreso y a esta comisión un plan de obras y viviendas populares, la urbanización de los barrios populares y los asentamientos, la creación de un banco de tierras y la generación de un impuesto a la vivienda ociosa. Que sean un punto de partida para desarrollar una salida a esta situación”.