La tropa kirchnerista cooptada y al mando del Presidente ha tenido que rebajar sus expectativas para el 24 de Marzo. Luego de pretender una movilización oficialista masiva a Plaza de Mayo, con festival y feriado incluido, se ha conformado con un escrache a Videla organizado por la agrupación H.I.J.O.S el sábado 18 de marzo.

 

Lucha política mediante, las cosas se han ido poniendo en su lugar. Después de todo, estamos frente a un gobierno que manda la Gendarmería a reprimir a obreros que pelean, a cuenta de los pulpos petroleros, y que golpea y tortura en las cárceles.

 

Kirchner no puede, no sabe ni quiere desmantelar el aparato represivo del Estado; es incapaz de superar el terreno de la demagogia. Para muestra, un botón: acaba de denunciar “excesos” en Santa Cruz, pero mantiene a la Gendarmería en Las Heras y al jefe de la Policía de la provincia, un incondicional.

 

No a la estatización

 

El feriado nacional del 24 de Marzo es un recurso clásico de las clases dominantes, que consiste en estatizar las jornadas de lucha del pueblo contra el Estado. Finalmente, la burguesía también estatizó el 1º de Mayo.

 

Sin embargo, la estatización de la jornada ha sido resistida por la inmensa mayoría de las organizaciones populares.

 

Los círculos gubernamentales han visto cómo todos los intentos de transformar la movilización del 24 en una marcha oficialista han fracasado. Ahora Kirchner amenaza con anular los indultos a sabiendas de que los que se han visto beneficiados ya han muerto o están cumpliendo prisión domiciliaria por causas que son imprescriptibles. La anulación del indulto no tocará en lo más mínimo al aparato represivo del Estado.

 

Las consignas de la movilización del 24 de Marzo resumen toda una plataforma. “No a la represión”, “libertad a los presos políticos”, “amnistía o desprocesamiento de los luchadores populares”, “fuera la Gendarmería de Santa Cruz”, “no al pago de la deuda externa”, “retiro de las tropas argentinas de Haití”, “no a las políticas que generan hambre y miseria”, son todas consignas que están presentes en cada lucha popular y que movilizan al pueblo contra el gobierno.

 

El Partido Obrero llama a copar la Plaza de Mayo y todas las plazas centrales del país para hacer una inmensa demostración de fuerza contra el gobierno de la misma clase social que dio el golpe de Estado el 24 de marzo de 1976.