Una manifestación de aproximada mente 5.000 personas rechazó el accionar de la empresa Aguas de Salta y la instalación de los medidores.

La movilización fue preparada por asambleas barriales, que se reunieron a discutir los contenidos de la renegociación del contrato con la concesionaria y las medidas a tomar para parar el aumento de tarifas y la instalación de medidores.

En Tartagal también se reunieron los vecinos, el centro de usuarios y las organizaciones de desocupados, para llevar adelante una movilización por el mismo reclamo.

El proceso asambleario continúa en la capital y se ha extendido al departamento de Güemes, donde desde septiembre se llevó a cabo una asamblea convocada por los centros vecinales de esa localidad por iniciativa del Polo Obrero.

Está planteada una nueva marcha en Salta para el próximo miércoles 8/9, en donde se espera una concurrencia masiva. El PO plantea provincializar el reclamo y convocar una movilización al centro del poder político, a la propia Casa de Gobierno, para frenar el tarifazo y la instalación de los medidores, y por la reestatización de la empresa bajo control de sus trabajadores y usuarios.