Políticas

23/8/2012|1236

Luján: no al trabajo infantil y a la regimentación de la juventud

EXCLUSIVO DE INTERNET


En la última sesión del Concejo Deliberante entró a comisión un proyecto que apunta a que niños de 10 a 12 años (sexto grado) de las escuelas públicas hagan el mantenimiento de la plaza Colón. Esta nefasta iniciativa fue presentada por el bloque Unión Celeste y Blanco (De Narvaez). Pretende: "instruir a los niños" a que "cuiden su plaza", a que aprendan sobre "especies vegetales que no conocemos". Por medio de este trabajo buscarían combatir "la venta de droga y el alcoholismo". Este sería un "proyecto de inclusión" para "evitar la violencia". El negrero proyecto se ve obligado a aclarar que "el ánimo no es que vengan a trabajar", aunque es justamente lo que persigue.


El pésimo estado de la plaza es responsabilidad de la intendencia y de los concejos deliberantes cómplices. Es parte de la destrucción de nuestra ciudad, que se traduce también en las barriadas, con calles intransitables, falta de iluminación y cloacas, etcétera. Atribuirles a los jóvenes la responsabilidad de estropear el espacio público y considerarlos futuros delincuentes es, esto sí, un acto políticamente delictivo.


Si pretenden que los niños aprendan de la flora o de la fauna locales que se haga sobre la base de un presupuesto educativo acorde a las necesidades populares: salario docente igual a la canasta familiar, infraestructura, material didáctico y excursiones, entre otros. El conocimiento no se reemplaza por el "pico y pala".


La mención a la droga, al alcohol y a la violencia resulta vía libre para la regimentación de la juventud: si trabajan en la plaza "evitaremos potenciales reos" o "reinsertamos a los que ya son reos". Y si no, está la Policía del gatillo fácil, para entramparlos en la droga y para organizarlos en el delito. Aquellos devotos del reforzamiento del aparato represivo ocultan que la fuerzas de seguridad son responsables de la inseguridad ciudadana.


La niñez y la juventud ya están "incluidas": forman parte, en su gran mayoría, de la fuerza laboral flexibilizada, que trabaja en negro en los countries y en los comercios de la zona. El Concejo Deliberante es cómplice: lo confirman los salarios de hambre que pagan a los trabajadores municipales.


La satisfacción de un "agradable espacio público" va de la mano de las reivindicaciones más sentidas de los trabajadores de Luján. El mejoramiento de la plaza debe realizarse mediante el nombramiento de personal especializado municipal -jardinería, cuidadores, etcétera-, con salario y bajo condiciones de convenio, y no someter a la servidumbre a los chicos.


Los otros bloques del Concejo Deliberante no han abierto la boca. Salvo el PJ, que dijo que hay que estudiarlo y convocar a las escuelas a que aporten. Acompaña la política de "ajuste" del oficialismo vecinalista.


Llamamos al más amplio debate en la comunidad educativa y en toda la población: las organizaciones obreras, populares, padres, jovenes y docentes debemos movilizarnos para derrotar este atropello contra los vecinos y contra los trabajadores de nuestro distrito.