MASSUH | Antes de comenzar, el gobierno ya anunció el fin de la "estatización"

Antes de que el proceso productivo de la planta haya llegado a su normalización técnica, cuando recién se han empezado a producir las primeras toneladas de pasta semi-química, el gobierno nacional se ha encargado de ponerle fecha a la finalización de la llamada estatización de la empresa. Kirchner, en campaña por Quilmes, ha dejado instrucciones precisas sobre el futuro de la planta.

El jueves 28, una asamblea de alrededor de 300 trabajadores se reunió para escuchar un informe sobre la puesta en marcha de la planta, Guillermo Moreno explicó que el sistema funcionaría por tres años, y que luego el fideicomiso sería disuelto. Habría, entonces, tres posibilidades: que siga en manos de Massuh, que sea vendida, o que se forme una cooperativa.

Con los fondos de la Anses, el propio Massuh es ahora uno de los más interesados en buscar compradores o nuevos socios. Tiene tres años para iniciar su propio “rescate”. Se le está pagando un canon de alquiler por la planta, con lo que achica sin costo alguno sus deudas. El fideicomiso “congela” los proyectos de expropiación de la planta. Sin la puesta en marcha de la planta por medio del fideicomiso, no habría posibilidad de comprador alguno, o que Massuh pudiera evitar la quiebra. Se trata de un claro rescate parcial del capitalista Massuh. El fideicomiso ha aportado solamente cinco millones de pesos, de modo que su cancelación podría ocurrir mucho antes de los tres años que se le ha asignado.

A los trabajadores aún se les adeudan cuatro meses de salarios más el aguinaldo de 2008. Moreno informó que la nueva administración reconocería esa deuda, pero que analizaría detenidamente la forma de efectuar los pagos, las condiciones laborales y convencionales, y que ‘estudiaría’ una recomposición salarial recién cuando se establezca un ritmo de producción adecuado.

Este 5 de junio, los trabajadores deberían estar cobrando la primera quincena bajo la administración del fideicomiso. Los compañeros hasta ahora sólo cobraron la segunda cuota de 600 pesos del Repro, que serán descontados de la deuda; reciben también 150 pesos por semana en vales para gastar en una cadena de supermercados.

El directorio de la ahora Papelera Quilmes (que sigue siendo propiedad de Massuh) está integrado por tres miembros de la comisión interna y dos representantes del personal mensual, junto a Moreno, un representante del Ministerio de Trabajo, uno de la municipalidad y un representante de la patronal.

Para asegurar una perspectiva estable a la fuente de trabajo, es necesaria la expropiación definitiva de la planta, sin compensación. Se tienen que pagar de inmediato todos los salarios adeudados. La deuda salarial obedece a un trabajo ya realizado.

En estos meses ha surgido una camada de luchadores obreros que ha forzado al Estado, luego de una larguísima dilación, a intervenir frente a la bancarrota. Es necesaria una elección gremial en la planta que permita defender los 400 puestos de trabajo. El propósito del gobierno es borocotizar la representación de los trabajadores, por eso hay que defender la independencia obrera.

Juan Ferro