La asamblea de trabajadores de Massuh discutió los pasos a seguir después de que la patronal pagara con retraso la quincena y volviera a postergar la reapertura de la fábrica para el 6 de abril.

El reinicio está en veremos y la propia patronal tira la pelota para adelante. La cuestión de fondo sigue siendo la misma: Massuh no garantiza nada. Es uno de los grandes grupos económicos afectados por la crisis industrial, la bancarrota capitalista y la caída de las exportaciones. Todo indica que Massuh está preparando la quiebra y no la reapertura.

Por eso los trabajadores y la Comisión Interna discuten las medidas necesarias para ponerle fin al vaciamiento patronal. Entre esas medidas está la formación de una cooperativa obrera. La última asamblea votó una campaña para que se investigue el destino del préstamo de 40 millones de dólares que la empresa obtuvo en agosto pasado. El control obrero del movimiento financiero y contable de Massuh dejó al desnudo las deudas millonarias que tiene la empresa con el Estado (Afip) y con los trabajadores.

También se votó el reclamo de un subsidio estatal complementario para cubrir las deudas salariales y la regularización del pago de las quincenas. Otra resolución importante fue el reclamo de un plenario de delegados al sindicato papelero para unir la lucha de Massuh con la de otras fábricas en conflicto o afectadas.

En la Asamblea se rechazó la propuesta de ocupar la fábrica mientras Massuh continúe pagando los sueldos. El acampe, que ya lleva tres meses, ha sido un centro de organización de los trabajadores y la coordinación con otras fábricas.

La Asamblea debatió profundizar la lucha y se resolvió la convocatoria a una reunión de comisiones internas, cuerpos de delegados, partidos políticos, organizaciones sociales y de derechos humanos para ponerle fecha a una gran marcha de Massuh a Plaza de Mayo (antes del 6 de abril).

Adelante compañeros.

D.M.R.