Políticas

11/11/2022

Media sanción a la exención de Ganancias en las guardias de trabajadores de la salud

El FIT-U votó a favor y anunció que volverá con el proyecto de derogación del “impuesto al salario”.

Votación en Diputados.

La Cámara de Diputados dio media sanción al proyecto que plantea eximir del pago de Ganancias respecto a los trabajadores de la salud que realicen más de cuatro guardias médicas al mes. La medida es tan solo un parche en un cuadro de una mayor precarización de los trabajadores, reformas antiobreras y bajos salarios.  Romina Del Plá y el FIT-U plantearon derogar Ganancias sobre los salarios.

La iniciativa fue presentada por el oficialista Daniel Gollan (exministro de Salud nacional y bonaerense), para “dar solución” a la falta de cobertura de las guardias en los hospitales públicos y privadas debido a que los trabajadores son afectados por el Impuesto a las Ganancias de extender su jornada laboral.

 

El planteo parte de la precarización y flexibilización laboral que impera en la Salud, donde los trabajadores deben realizar “horas extras” para poder obtener una salario que les permita vivir, pero si sobrepasan cierto límite son alcanzados por el gravamen de Ganancias.

La bancada del Frente de Izquierda Unidad votó a favor de la medida porque implica una desafectación concreta respecto al salario de los trabajadores. Romina Del Plá, en su intervención, enfatizó respecto a los bajos salarios en la Salud –en medio de un masivo conflicto de residentes, concurrentes y trabajadores del sector-, la necesidad de recomponer los salarios y ampliar la planta laboral y la imperiosa tarea de terminar con la confiscación de Ganancias sobre los salarios.

El gobierno se opuso a extensión del beneficio votado a los trabajadores que se encuentran bajo la forma irregular de monotributistas. La solución que han planteado es la que les resulta más compatible con el ajuste fondomonetarstas, evitando que colapse todo el sistema sanitario.

Ganancias, reforma laboral y parches

El debate en Salud recorre a todo el movimiento obrero. Recientemente los trabajadores camineros obtuvieron una solución similar respecto a la no afectación del salario cobrado en concepto de viáticos.

La cuestión de las horas extras y la jornada laboral de los trabajadores es fundamental para las patronales. Históricamente ha sido un recurso de los capitalistas que, combinado con salarios insuficientes, habilita a la sobreexplotación de los trabajadores por un costo que es inferior al que equivaldría al contratar un nuevo empleado, con todo lo que ello conlleva.

Sin embargo, la propia intervención del Estado con la extensión de Ganancias a la cuarta categoría, alcanzando así los salarios, ha operado como un método disuasivo para los trabajadores, que rehúsan extender su jornada para que no los alcance el gravamen y así no tener que trabajar gratis o para el Estado.

Como solución, las patronales reclaman reformas laborales que integren modificaciones a la jornada de trabajo y a la contabilización de las horas extras. Es lo que ha ocurrido en Toyota, con la extensión de la jornada a los fines de semana –suprimiendo en los hechos las horas extras-, o lo que ocurrió con la burocracia de Wasiejko en el gremio del neumático con la implementación de modalidades del tipo 6×2, con franco rotativo, que operan en la misma dirección.

Otro recurso patronal es el de la implementación del Banco de Horas, lo que permite absorber contingencias de los capitalistas sin necesidad de abonar el excedente de trabajo demandado en una semana.

Terminar con Ganancias en los salarios

“Vamos a presentar nuestro proyecto de derogación de Ganancias sobre la cuarta categoría, porque es un impuesto que recae fuertemente sobre trabajadoras y trabajadores y muy levemente sobre las sociedades patronales empresarias, que son las que realmente tienen ganancias”, manifestó Romina Del Plá en su intervención, reivindicando la posición de principios que sostiene la izquierda del FIT-U ante esta cuestión.

Cuando los capitalistas buscan ampliar la producción por diversos medios es ilógico que el Estado grave a los trabajadores y no a quienes sí se enriquecen con ganancias millonarias. La diferencia en la recaudación fiscal por la derogación del “impuesto al salario” debe saldarse con mayores impuestos a los capitalistas y sus fortunas.

Una respuesta integral al problema de los trabajadores de la salud y de todos los trabajadores debe partir de una recomposición general de los salarios para que todos partan de la canasta familiar como piso, seguido de la ampliación de la planta de trabajadores para cubrir todas las necesidades sanitarias -evitando la sobrecarga laboral del personal- y la derogación del “impuesto al salario” para desafectar al conjunto de los trabajadores de este gravamen confiscatorio e injusto.