"Desde el MST llamamos a sumarse a este espacio unitario de lucha por reconquistar nuestro petróleo y nuestros recursos naturales” (Alternativa Socialista, MST).

 

El MST-AS tiene una posición estatista, no socialista, o sea a favor del desarrollo capitalista, no como medida de transición en la lucha por poner fin a la dominación del capital.

 

Por eso es que el MST no tiene problemas en señalar como un ejemplo a seguir… el de Noruega: “En cambio Noruega, por ejemplo, es el séptimo productor y el tercer exportador de petróleo del mundo, así como el tercer exportador de gas. En ese país capitalista e imperialista ambos recursos son propiedad del Estado a través de la estatal Statoil, la mayor empresa noruega. Pese a que se privatizó el 30% del capital, Statoil opera desde los pozos hasta las estaciones de servicio y fiscaliza a las petroleras extranjeras, que pagan el 80% de impuestos sobre sus ganancias. A su vez, existe un Fondo Gubernamental del Petróleo que maneja el conjunto de esa renta. Qué diferencia, ¿no?” (ídem).

 

¿Cuál es, en verdad, la diferencia? Que el ingreso que recibe el Estado imperialista noruego está destinado a sostener a los monopolios noruegos e internacionales más allá de los petroleros.

El MST no tendría diferencias con la “capitalista e imperialista” Noruega.