La convocatoria de la Multisectorial No a la base yanqui de Neuquén, convocó para el viernes 19 de noviembre a dos actividades. Por la mañana se presentó un recurso solicitando al gobierno la paralización de las obras en curso. Y por la tarde se realizó una marcha por las calles céntricas, que luego de pasar por la Casa de Gobierno, culminó con un acto en el monumento a San Martín.

Esta es la segunda actividad que hacemos en poco tiempo, a partir del reinicio de las obras a mediados de este año.

Su origen

La idea de tales obras parten de un ofrecimiento que el embajador de EE.UU en el país le hiciera al entonces gobernador Jorge Sapag en el año 2008. A partir de entonces el Comando Sur del ejército envió a Neuquén equipamiento variado y vehículos para utilizarlos en el combate de incendios y catástrofes. Parte de ese equipamiento fue recibido no sólo por el gobierno provincial, sino por el gabinete municipal de Neuquén en manos del radical Martín Farizano encabezando la Concertación, una alianza cuyo gabinete integró Libres del Sur, el UNE, dirigentes del PJ, etc.

Es decir, el proyecto de financiar una base a través de la unidad bélica de EE.UU conocida como Comando Sur, tiene las huellas digitales no solo del MPN. Ya en el 2009, el gobierno provincial solicita mediante un acta la construcción de una infraestructura en un terreno de la ciudad capital que oportunamente se destinaría a tal fin. Un año después, ya en el 2010, la embajada ofrece construir un centro de operaciones en Neuquén y otras instalaciones en Zapala.

Nace así lo que hoy se está construyendo a la vera de la Multitrocha norte, enclavada en el Parque Industrial petrolero de Neuquén. Respecto a las obras en Zapala, no se conoce que estuvieran en marcha.
Luego del acuerdo con Chevrón, impuesto en la provincia con una represión de horas, las obras se paralizaron y solo existía, hasta hace unos meses, un predio fiscal cercado. Pero en 2018 se descongelan los trámites hasta reiniciar las obras este año.

La movilización y como seguirla

 

La marcha  convocó a unas 1.500 personas, de las cuales el Partido Obrero y el Polo Obrero éramos abrumadora mayoría, aportando también una batucada que no dejó de cantar “Fuera yanquis de América Latina”.
Como parte de la multisectorial estuvo la APDH, IS, MST y una delegación de veteranos de Malvinas. Estuvieron presentes César Parra, concejal electo por el Fit-u y  Patricia Jure, diputada provincial, quien viene batallando en la Legislatura para que el gobierno provincial brinde informes sobre esta Base, como un aporte a esta fundamental lucha.

 

Asimismo, hubo una borrada masiva de sindicatos, organizaciones y partidos que conforman o apoyan políticamente al Frente de Todos.

Al finalizar se leyó un documento y luego hubo algunos oradores. Cesar Parra a su turno desarrolló la ligazón directa que tiene esta injerencia de EE.UU en la zona de Vaca Muerta y la custodia de los intereses de los capitales norteamericanos con el acuerdo servil que el gobierno nacional se apresta a cerrar con el FMI, la militarización de la cordillera con los reclamos mapuches y la autorización al ingreso de tropas al país votado en el Congreso, a excepción del Frente de Izquierda.

Es evidente, como dijo Cesar, que esas instalaciones tendrán una cobertura humanitaria, pero será un centro de espionaje e intervención del Comando Sur.

Esta denuncia del electo concejal Cesar Parra, tiene sólidos fundamentos en que en el reciente acto de cambio de jefatura del Comando Sur del ejército yanqui, sus más altas jerarquías han expresado conceptos que constituyen una amenaza y desnuda que el financiamiento de la base en Neuquén no tiene ningún fin altruísta. El Jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, general Mark A. Milley, relanzó la teoría del ‘patio trasero’ y desarrolló una agresiva línea de injerencia política y militar. Dijo textualmente el militar yanqui que “acá estamos en un vecindario. Trabajamos codo a codo para asegurar este hemisferio. Quien se oponga a nuestra seguridad, a nuestra prosperidad o la de nuestros aliados, tiene que enfrentarse al Comando Sur”.
Estos conceptos no fueron un exabrupto del general, fueron reiterados en el mismo acto por el secretario de Defensa de EEU, Lloyd Austin cuando afirmó que “controlando la seguridad de nuestros vecinos, hacemos que una región complicada sea más segura”.

 

Por último la nueva jefa del Comando Sur, generala Laura Richardson reforzó todo diciendo que “la seguridad de esta región está directamente asociada con nuestra propia seguridad nacional”
Es decir que cuando la Exxon, Chevrón u otros capitales de EE.UU se consideren afectados por los reclamos populares, con el argumento de la seguridad nacional deberá enfrentarse al Comando Sur, una unidad de combate como ella misma se define.

Hubo planteos de realizar nuevas y más contundentes actividades para paralizar el desarrollo de la obra. La Multisectorial tiene grandes tareas por delante.