Políticas

26/2/2015|1352

“No se tiene conciencia del grado de deterioro de las fuerzas tradicionales “

Entrevista a Jorge Altamira, en “El Tribuno” de Jujuy (conceptos principales)


El referente del Partido Obrero a nivel nacional, Jorge Altamira, se presentó ayer en nuestra provincia para encabezar la charla debate “Desafíos del Frente de Izquierda”. Y participó de la inauguración de la sede partidaria en la capital jujeña, en Salta al 1000.


 


En una entrevista con nuestro diario ofreció una proyección de lo que puede suceder políticamente en nuestro país, con vistas a las Paso de agosto y a las elecciones generales de octubre de este año.


 


-¿Cuáles son los desafíos que tiene el Frente de Izquierda de cara a las próximas elecciones?


 


-El desafío, en primer lugar, es atraer nuevos sectores, hay toda una gama de organizaciones populares y de izquierda que no se referencian políticamente o que incluso llegaron a referenciarse con el kirchnerismo y están completamente desilusionados, y el desafío es que vean al Frente de Izquierda como una alternativa política.


 


El otro desafío es que el mismo Frente de Izquierda tenga un desarrollo más constante, no solamente electoral, porque si va a convertirse en una alternativa de gobierno en algún momento es conveniente que arme una estructura política y eso requiere de una actividad constante.


 


El otro desafío, finalmente, es entender qué está pasando en este momento, porque la imagen que dan las encuestas es una imagen distorsionada. Aunque (Mauricio) Macri (Daniel) Scioli, (Sergio) Massa, aparezcan disputándose una posición de privilegio, son frentes con grandes crisis internas. Como al mismo tiempo, con la muerte de (Alberto) Nisman, se ha puesto en evidencia una gran crisis de Estado, pugnas y choques, al final la ciudadanía se va a ver obligada a mirar de un modo diferente al panorama político.


 


-El Frente de Izquierda no acompañó la marcha del 18F ¿Cuál es la postura frente al caso Nisman?


 


-Es muy sencillo; hay una crisis de Estado y se ha abierto una disputa por el control de los aparatos del Estado. El gobierno ha perdido el control de una parte del Estado, en los servicios, lo ha perdido en el Poder Judicial, y busca recuperarlo. Por eso pone a (César) Milani y el desenlace de todo esto es la nueva inteligencia, y todo el poder a Milani. Y la oposición, y una parte del Poder Judicial, están peleando sus propias prerrogativas en el Poder Judicial. El Frente de Izquierda no esta en una pelea entre dos camarillas judiciales, o entre dos camarillas de servicios; denuncia a las dos camarillas judiciales y de servicios como camarillas que son. Decimos que esto, si continúa de esta manera el país estalla porque estalla el aparato estatal. Por eso decimos que deben abrirse los archivos de la Secretaría de Inteligencia del Estado (Side), porque ningún juez va a alcanzar a través de una indagatoria lo que se puede alcanzar con una apertura de archivos; que el gabinete completo vaya al Congreso Nacional a una interpelación parlamentaria televisada, porque lo de Nisman tiene que ver con una lucha política, y por último que se vaya Milani, un hombre que está procesado por delitos de lesa humanidad no puede continuar.


 


La oposición el otro día se jactó de no tener ningún planteo diciendo “vamos a rendir memoria”, y el que tiene un planteo muy claro es el Frente de Izquierda.


 


-El domingo se realizaron las elecciones primarias en Mendoza, ¿qué análisis hacen de la disputa del segundo lugar con el Frente para la Victoria que han obtenido?


 


-Se trata de una consolidación, porque en las elecciones anteriores habíamos obtenido un porcentaje similar. Luego, el Frente para la Victoria, para disputar con nosotros, necesita armar una colectora de cinco listas, cuya electorado va a ir en parte al Frente en la próxima elección general.


 


Ahora vienen las elecciones en Salta, donde las expectativas son más amplias.


 


-Según el resultado de las elecciones pasadas, estarían en condiciones de disputar el municipio…


 


-Quiero decirlo objetivamente, o sea sin ser triunfalista. Objetivamente, decimos que hace un año y medio ganamos, y el que ganó hace un año y medio, objetivamente puede volver a ganar, por eso hay que ver como se acomodan las distintas fuerzas políticas. Como son hitos dentro de una campaña que culmina en octubre, estos hitos también van a ir “acomodando los melones en el carro”.


 


-Salta es la principal referente en el NOA del Frente de Izquierda, ¿cómo se posiciona en Jujuy y la región para este año?


 


-Hemos llegado a un acuerdo con Carlos Santillán en el sentido de que él desea participar del Frente, o colaborar políticamente, con lo cual vamos a contar con el apoyo y la simpatía de mayores sectores en Jujuy; se va a integrar a una experiencia nacional. En esas condiciones vamos a superar a años anteriores en términos de capacidad de movilización y de llegar al interior con mayor profundidad.


 


La presencia del Frente en la provincia de Jujuy y el acuerdo con Santillán para hacer una política común significa el esfuerzo del Frente de Izquierda por reconquistar la independencia de los trabajadores frente al poder político, que está atrapado en redes clientelares.


 


Si el trabajador no es un sujeto independiente del Estado, no puede ser sujeto de transformación.


 


-¿Dónde se ve el Frente de Izquierda el 10 de diciembre?


 


-Yo no descartode que el Frente de Izquierda pueda convertirse en una tercera fuerza. Y, en circunstancias excepcionales ir a un ballotaje.


No se tiene conciencia del grado de deterioro de las fuerzas tradicionales. Ellos empezaron la campaña el año pasado, y seis meses después no tienen nada armado. El mismo (Mauricio) Macri tiene una crisis enorme en la capital. Si el ritmo de la crisis, en especial a nivel mundial, se acelera, nosotros vamos a ser los terceros. Imaginemos tener a la izquierda como tercera fuerza durante dos meses seguidos de campaña electoral.


 


Nosotros vamos a llamar abiertamente a las bases kirchneristas a que no voten a Scioli, y voten al Frente de Izquierda; nosotros vamos a hablar abiertamente para que las bases de Pino Solanas no voten a Massa y vote al Frente de Izquierda. Quiero decir que vamos a llegar a oídos receptivos, porque nunca se hubieran imaginado, como nacionales y populares, estar con un Scioli, y como progresistas estar con un Massa. Eso va a provocar un viraje político, nosotros apuntamos a desarrollar una ruptura política en el interior del electorado y al viraje que surja de esa crisis.