Políticas

5/4/2007|986

Piquetazo cartonero en Bahía Blanca


Protestaron frente al Palacio Municipal por la aplicación de normas que regulan la actividad. ¡Borombombón, borombombón, soy cartonero, no ladrón!", cantaba el grupo, mientras preparaban un puchero en una improvisada olla popular. "Si andamos laburando con un carro es porque no tenemos otro trabajo."


 


El piquetazo del pobrerío hizo recular a los reaccionarios de la Intendencia. La determinación de los cartoneros, que protagonizaron en dos semanas tres movilizaciones, hizo tomar nota a los funcionarios de que el horno no estaba para bollos, y hasta la propia policía dejó de aplicar las reglamentaciones que los “habilitaban” “a actuar”.


 


La nueva ordenanza municipal regula el horario y el radio donde los cartoneros (antes cirujas, ahora “trabajadores informales”) deberán desarrollar sus labores. Detrás de este reordenamiento urbano, luego de secuestrar los carros y los caballos, se resguarda el negocio del reciclado del cartón, mientras subsidian generosamente a Cliba.


 


Del pliego de reivindicaciones sólo se ha dado curso al pedido de conformación de una cooperativa, pero hasta la fecha, como ocurre con todos los proyectos autogestionados por los trabajadores, el capital inicial está ausente, a diferencia de lo que ocurre con los generosos subsidios a las cámaras empresariales.


 


El intendente y sus funcionarios salieron a atacar al Partido Obrero. Hemos apoyado desde un primer momento esta lucha.