Políticas

21/6/2007|997

Piquetazo de 12 mil compañeros

Solá contra los comedores populares

Desde el cambio de gabinete provincial y el ingreso del ministro Varela a la cartera de Desarrollo Humano y Social, hace un año, se comunicó a las organizaciones piqueteras que la política del gobierno provincial sería la misma que la del gobierno nacional: terminar con los comedores, para llegar a alguna forma de ayuda “individualizada”.


Aunque el gobierno llevó adelante una política activa contra los comedores populares, la “ayuda individualizada” no llegó a nadie.


Hace un año el gobierno no cumple con la entrega regular de alimentos en cantidad y variedad que corresponde a los acuerdos con las organizaciones piqueteras.


Contrastando con la tesis oficial de que los comedores cada vez harían menos falta, ha ido aumentando la concurrencia de muchos de nuestros comedores y se han acercado al Polo Obrero compañeros que plantean la necesidad de abrir comedores en barrios nuevos. Esto se relaciona con dos hechos. Por un lado, la inflación desesperante, que hace que compañeros que tienen una changa o hasta algún trabajo formal pero con salario debajo de la línea de pobreza, recurran nuevamente a los comedores como complemento. Por otra parte, se ha cerrado una cantidad de comedores, como consecuencia de la política del gobierno. Esos compañeros, dejados en banda, recurren al Polo Obrero para reorganizarse.


Se conformó a principios de año un frente de la inmensa mayoría de organizaciones piqueteras independientes del Estado (Polo Obrero, Frente Darío Santillán, MTR, CCC, MST-TV, FTC, CTD Aníbal Verón y más de 30 grupos locales), que atienden una red de comedores populares y merenderos en la que comen regularmente más de 100 mil personas.


A fines de mayo el gobierno anunció que privilegiaría la entrega a los aparatos municipales y las organizaciones kirchneristas. La respuesta del movimiento piquetero fue lanzar un plan de lucha. El primer paso de la campaña electoral de Scioli es un ataque a los comedores populares y merenderos del movimiento piquetero para reinstalar a sus punteros en los barrios; no estamos frente a un problema administrativo sino a una ofensiva oficial abierta.


Ya hemos cumplido el primer paso del plan de lucha con una movilización de 12 mil compañeros que rodeó todo el centro de La Plata el día 12 de junio por casi cinco horas. Establecimos piquetes frente a todas las principales dependencias y finalmente frente a la Gobernación.


El 22 vamos todos juntos a una nueva medida de lucha con cortes simultáneos en los ingresos a La Plata desde las 11 de la mañana, y la instalación de una olla popular frente a la Casa de la Provincia de Buenos Aires, en Capital Federal.


El 26 somos todos impulsores del corte del Puente Pueyrredón, a 5 años del asesinato de Kosteki y Santillán por órdenes de Duhalde y Solá, por el castigo a todos los responsables y contra el operativo de encubrimiento y cajoneo de las causas que lleva adelante Kirchner.


Y nos mantenemos en lucha, profundizando las acciones hasta quebrar la ofensiva del gobierno contra las organizaciones piqueteras y sus comedores populares y merenderos.