La patronal de Prestolite-Indiel no cesa en sus intentos de quebrar la unidad de la fábrica. El miércoles 30 firmó un acuerdo para la concesión de un premio a los trabajadores de depósito. El llamado “premio alfa” es del 28% para toda la fábrica; pero para los compañeros de depósito será sólo del 10%. Además, deberán renunciar a cualquier reclamo, incluyendo los juicios ya iniciados y el pedido de retroactividades.

Este acuerdo fue impulsado por la mayoría de los delegados aduciendo que era “lo más que se podía conseguir”.  Agrandada, la empresa intentó ir por más: el jueves 31 despidió a tres compañeros (dos de ellos de depósito). La respuesta fue tan contundente como ante todos los despidos de los últimos años: paro general de los tres turnos hasta conseguir la reincorporación. El viernes 1° el Ministerio dictó la conciliación obligatoria con los despedidos adentro.

Hay que prepararse para la reanudación del conflicto cuando venza la conciliación. La patronal intentará volver a atacar y no debe tomarnos por sorpresa.