Apenas pasada las 20 horas del sábado se anunció oficialmente que Mendoza sumaba 5 casos positivos a la pandemia del Covid-19, en tan solo un día.

En algunos casos estos portadores llevan casi una semana aislados en hospitales, es decir, eran ingresados a internación cuando se comenzaban a tomar medidas, pero la inmensa mayoría de la población continuaba con actividad normal.

El paso de casi una semana para la confirmación hace sospechar sobre la manipulación de la información, siempre en nombre de evitar la “paranoia y psicosis social”. No sería la primera vez que el gobierno provincial apela a estos métodos.

El gobernador Suárez sigue mintiendo

Suárez se muestra activo “recorriendo” la ciudad pero las medidas tomadas siguen siendo de dudosa efectividad y lo seguirán siendo mientras no decrete el pase a planta permanente de todos los trabajadores contratados, tercerizados y prestadores (monotributistas) y establezca la suspensión del pago de la deuda provincial para direccionar a la salud mayores recursos. Es decir, mientras no tome medidas de fondo para enfrentar de verdad la pandemia.

Por el contrario Rodolfo Suárez se encuentra más preocupado por no afectar la rentabilidad capitalista. Fue el mismo gobernador quien le reclamo a la Nación que “se pudiera levantar la cosecha”, es decir, reunir a decenas de trabajadores con ingresos de indigencia, para garantizar las necesidades de las grandes familias bodegueras.

Por el contrario mientras miles de albañiles, empleadas domésticas, remiseros y demás trabajadores informales se quedan sin ingresos, otros son despedidos. En este cuadro la cuarentena no puede ser cumplida por más que se militaricen los barrios y se saque el ejército a la calle. La disyuntiva no puede ser morir por la pandemia o morir de hambre.

¡Medidas urgentes ya!

La situación se está agravando pese a que la prensa adicta insista en mostrar una realidad mendocina diferente, no al país, si no al mundo.

Esta situación hace urgente que se establezca el reparto masivo de alimentos, garantizar un ingreso mínimo para todas las familias trabajadoras y la prohibición de suspensiones y despidos en toda las actividades.

También es extremadamente urgente garantizar centros de diagnóstico que realicen el test de Covid-19 de manera masiva en la provincia, porque con una población de casi 2 millones de personas y más de 300 mil mayores de 65 años, esperar 5 días los resultados de test que llegan del Malbrán en CABA es el equivalente a enfrentar la pandemia con una semana de retraso.