Políticas

29/9/2018

PTS: sin principios y sin rumbo, ataca el gran plenario obrero de Luz y Fuerza

(FDL-Adiuc)

El PTS ha salido a atacar abiertamente al reagrupamiento de la clase obrera cordobesa más importante de muchos años para esta parte, que representa el Plenario del Sindicalismo Combativo que sesiono en Luz y Fuerza el pasado sábado 22.


El Plenario fue discutido y preparado por los trabajadores en lucha, como sucedió en las asambleas de Luz y Fuerza, o de los municipales de Jesús María, entre otros; también en la asamblea interfacultades de la Universidad de Córdoba y en la asamblea #NiUnaMenos. En estas últimas, los militantes del PTS presentes a la hora del debate simplemente guardaron silencio. Para desarrollar ese ataque, PTS endilga un supuesto burocratismo al conjunto del Plenario Combativo, es decir a mas de 800 directivos, delegados, activistas obreros y estudiantiles; tomando como base la presencia de Suarez, secretario general de Luz y fuerza Córdoba.


Con esa provocación, el PTS ningunea e intenta suprimir el gran avance para el movimiento obrero y popular, que represento el Plenario Combativo. El ataque se expresa en lo que se dice, pero por sobre todo en lo que no se dice. El PTS miente y oculta los hechos en forma alevosa para justificar una posición oportunista. En primer lugar hay que recordarle al PTS, que el Plenario contó con la participación de los gremios de Luz y Fuerza, SUTNA, UTS, Sitram Jesús María, Aceiteros, CTA Autónoma y la minoría de ADIUC, a los cuales se suma la presencia de la inmensa mayoría de las agrupaciones opositoras en UEPC, delegados, agrupaciones y comisiones internas antiburocráticas de UOM, UTA, SEP, ATE, No docentes, Stia, Adiuvin, Molineros, Soeva, Comercio, entre oros. El caso de UEPC es emblemático, porque en el Plenario se discutió y resolvió conformar una lista única de toda la oposición para recuperar UEPC en 2019, lo que nunca antes se puedo saldar en el propio debate del sindicato de educadores. El ataque al Plenario Combativo continúa en la negación del programa y el plan de lucha resuelto. Las conclusiones a las que llega el Plenario Combativo constituyen lo más avanzado en cuanto a desarrollo político y sindical de la clase trabajadora en la provincia.


Del mismo modo el Plenario resolvió un plan de lucha que integra las iniciativas obreras (Paro del 24 y 25/9, contra el presupuesto del FMI, en defensa de Luz y Fuerza) y populares, en la idea de forjar la unidad obrera-estudiantil junto al movimiento de mujeres, e incluso al movimiento ambiental. En ese sentido se resolvió movilizar con la asamblea #NiUnaMenos el 28 de septiembre por el aborto legal y participar del ENM. La lucha por unir a los trabajadores, las mujeres y la juventud es ninguneada por el PTS. Hay que denunciar con todas las letras la posición liquidacionista del PTS: se rechaza la evolución política y sindical de una parte de los movimientos de lucha. El PTS quiere que el Sindicalismo Combativo no exista. El PTS no tiene principios.


Detrás del ataque al Sindicalismo Combativo, se trata de encubrir una posición puramente oportunista. En un pasaje de la crítica publicada en Izquierda Diario, se menciona lo siguiente: “… mientras intentan marginar al PTS, corriente mayoritaria dentro del FIT”. En esa pequeña frase el PTS miente doblemente: ni se lo ha excluido, ni es la corriente mayoritaria de nada. Pero en esas mentiras, están las causas de su ataque a los combativos. Atacando al sindicalismo combativo, buscan ocultar su retroceso en el movimiento obrero, nacional y local. Las posiciones que supieron detentar han sido diluidas por una política de autobombo electoralista (oportunista) que, en Córdoba, llevaron a la liquidación y posterior abandono de reagrupamientos obreros como VW en el Smata. Las consecuencias de esta política están a la vista en el retroceso total de esta fuerza en el movimiento obrero.


Esta marginalidad en el movimiento sindical los lleva a una ausencia real de las principales luchas, a las cuales solo buscan explotar mediáticamente en las redes, pero sin un gramo de orientación o influencia. Es lo que sucedió con la enorme huelga de las trolebuseras y trabajadores de UTA. También con los obreros del SUTNA, que fueron a la lucha por el salario y el CCT. Estuvieron ausentes de la persistente lucha de los trabajadores de CONICET contra los despidos y su correlato entre los trabajadores del INTI. Han tenido un paso fugaz por la tenaz lucha de los municipales de Jesús María, que recientemente rompieron el techo salarial conquistando un 40% de aumento salarial. Y no han pasado de algunas declamaciones, en la lucha encarnada por los trabajadores de Luz y Fuerza.


El PTS con Suarez, para la foto


El PTS es un impostor. Quiere atacar al sindicalismo combativo porque Suarez se hizo presente en el mismo, pero no tiene ni para empezar. El propio PTS ha sentando a su legisladora Vilches, junto a Suarez en todas las conferencias de prensa que pudo, donde también estuvieron legisladores del kirchnerismo; luego subieron a Del Caño al palco junto a Suárez, representantes de las 62 organizaciones peronistas y Saillén en el acto del 15 de agosto; y Bregman agradeció a la conducción de Luz y Fuerza por haber publicado en el Electrum un tweet de apoyo a la lucha que ella había enviado. La presencia de Suarez el Plenario, según la autora de la nota, expresaría las posiciones de componenda con la burocracia sindical pejotista, en búsqueda de eventuales acuerdos sindicales. Omiten alevosamente que la sumatoria de Luz y Fuerza a la convocatoria al Plenario Combativo fue resuelta en una asamblea obrera (y cuerpo de delegados) que deliberó y resolvió la participación del sindicato; por eso intervino Suárez, pero también el activismo del gremio opositor a Suarez, los cuales valoraron enormemente la importancia del Plenario y lo impulsaron, tal cual se refleja en las entrevistas publicadas.


Arriba, tercera desde la derecha. Laura Vilches, legisladora del PTS.


Para el PTS es burocrático que una asamblea de trabajadores que están luchando contra Schiaretti, vote participar y participe del Plenario Combativo. Por el contrario, para el PTS es progresivo aparecer en todos los actos y conferencias con Suarez, sin que lo resuelva ningún trabajador. Mientras se desconoce la democracia obrera y la lucha, se enaltecen los planteos oportunistas. La impostura llega a lo grotesco.


La lucha en luz y Fuerza


 El proceso de los trabajadores de Luz y Fuerza resultó ser una escuela política de la lucha que el clasismo y la izquierda debe desenvolver dentro de los sindicatos. La avanzada del gobernador Schiaretti contra EPEC encontró una fuerte resistencia entre los trabajadores. Con asambleas, piquetes, ocupaciones y movilizaciones masivas, los trabajadores de Luz y Fuerza han hecho naufragar los intentos de privatización de EPEC, mientras la modificación del CCT se encuentra empantanada. Esta orientación se abrió paso gracias al reclamo y disposición de lucha del conjunto de los trabajadores y particularmente del activismo clasista, que los militantes del PO integran. Apoyamos esa decisión con una intensa campaña de la bancada de Eduardo Salas, FIT-PO, que desnudó las intenciones privatizadoras del gobierno provincial y brindó una orientación para enfrentar el vaciamiento de EPEC y el ataque a sus trabajadores.


El activismo lucifuercista fijó una perspectiva de movilización en unidad con el movimiento obrero y la juventud, que fue abrazada por las bases del gremio. Con este método se impuso la enorme movilización el pasado 15 de agosto, la cual fue propuesta por el activismo opositor.


La crudeza del ataque de Schiaretti y el accionar decidido de la oposición, logró convertir la lucha de los trabajadores de Luz y Fuerza en una causa popular, colocando al activismo a la cabeza de las grandes movilizaciones de la comunidad educativa. El posicionamiento de Suarez expresa una crisis política y sindical. Su presencia en el plenario, lejos de reflejar una adaptación del clasismo a la burocracia, muestra los límites que tiene una conducción pejotista, que hasta ayer apoyaba públicamente a Schiaretti, frente a la decisión y la lucha de los trabajadores que enfrentan la privatización y la reforma laboral. Y además demuestra una lucha política de parte del activismo y la izquierda por extender la lucha a todos los sindicatos y sobre esa base reagrupar al activismo que pelea por una nueva dirección en los sindicatos, que en nuestro planteo debe ser clasista.


El PTS nada aporta sobre de esto, porque simplemente no interviene en la destacada lucha lucifuercista. En cambio, el PO hace tiempo que apoya a la oposición combativa del gremio, que viene dando importantes pasos en su estructuración. De nuevo, el PTS en su parálisis, pretende que el activismo y los trabajadores lucifuercistas no evolucionen hacia la izquierda y el clasismo.


Defendamos el Plenario del Sindicalismo Combativo


El impacto inmediato de este reagrupamiento se vio reflejado en la enorme columna que el sindicalismo combativo puso en las calles en el marco del paro del 24 y 25. Con un acto independiente, la columna del clasismo igualó la deslucida convocatoria de las burocracias de la CGT Rodriguez Peña y la CTA kirhnerista, a la vez que levantó una tribuna de denuncia a las mismas por su tregua con el ajuste de Macri y Schiaretti. Por su parte, el PTS prefirió mantenerse en la marginalidad con una veintena de militantes, autoexcluyéndose de la única convocatoria que fijó un norte estratégico para el movimiento obrero en la provincia.


El PTS ha perdido el rumbo. Por el contrario, la CSC y el Partido Obrero se vuelcan a la lucha política en cada gremio, estructurando organizaciones clasistas y antiburocráticas, comprometidos a fondo en el triunfo de cada lucha obrera, y desplegando una fuerte agitación política que permita el avance de la conciencia de los trabajadores que realizan enormes esfuerzos por sacarse de encima la loseta que constituye la burocracia sindical. Estamos empeñados en abrir paso a una nueva dirección clasista en los sindicatos, y por ello impulsamos un Congreso de Delegados de Base de las centrales sindicales, y un Plenario Obrero Provincial, para que los trabajadores puedan elaborar un plan de lucha, hacia la huelga general, y un programa político y económico de salida a la crisis. Sobre esas bases llamamos al activismo obrero, al que protagoniza las ocupaciones en la universidad y a las que impulsan la Asamblea #NiUnaMenos, a defender el Plenario del Sindicalismo Combativo y el plan de lucha resuelto para derrotar a Macri, Schiaretti y el FMI.