Políticas

21/3/2013|1260

Puerto Madryn: La lucha por la vivienda

Otra vez en Madryn asistimos al nacimiento de un nuevo asentamiento. Esta vez, en el acceso oeste. Cerca de 200 familias debieron ocupar tierras para acceder a un techo propio. Se estima en más de 2 mil el número de las familias que viven en asentamientos informales. Estas ocupaciones han adoptado nombres propios: Nueva Chubut, La Arboleda, La Loma, 27 de Octubrey el barrio Alta Tensión. A la población obrera de esta ciudad le está vedada la posibilidad de acceder a una vivienda digna. Puerto Madryn tiene un gran corsé: su tejido urbano se encuentra dentro de la "estancia Madryn".


Son 13 mil hectàreas pertenecientes a la firma San Miguel. Por lo tanto, el municipio no cuenta con tierras fiscales y la firma tiene el monopolio de la tierra ociosa. El gran crecimiento demográfico de la ciudad, sin la realización de un plan de viviendas, es otro factor determinante de la actual situación. De 7 mil habitantes en 1970, pasamos a ser más de 100 mil en 2013. La población fue sucesivamente atraída por las radicaciones de empresas textiles -que cerraron al caerse los beneficios fiscales que tenían- , luego por la instalación de Aluar y, en los 90, por el auge de las pesqueras, hoy en una crisis terminal. Los ingresos de las familias obreras han bajado en forma sustancial, aumentando las tercerizadas y el trabajo en negro. El monopolio de la tierra ha acrecentado la especulación inmobiliaria. Los valores de los terrenos van desde los 20 mil dólares hasta más de 130 mil, con alquileres de más de 2 mil pesos. Mientras tanto, como se sabe, una canasta básica familiar ronda los 8 mil pesos y los sueldos permanecen en una media de 5 mil. Se comienza a entender por qué aumentan los asentamientos.


Hace pocos meses se desató un escándalo en el Concejo Deliberante al hacerse pública la venta de terrenos loteados cerca del mar, con valores muy inferiores a los del mercado. Esos lotes fueron vendidos a familiares de concejales. La dirigencia política se ha demostrado históricamente incapaz de satisfacer las necesidades populares del acceso a una vivienda digna. Sus propuestas siempre fueron las mismas; por ejemplo, la de llamar a un empadronamiento de las personas que tengan problemas de vivienda. Estas listas duermen el sueño de los justos mientras las familias se ven obligadas a esperar más de siete años en obtener alguna respuesta. El actual intendente, Ricardo Sastre, se ha sumado a la política desatada por el gobernador, Martín Buzzi, de "tolerancia cero" a las usurpaciones. Amenaza a los ocupantes con no permitirles empadronarlos ni que obtengan beneficio alguno en el futuro si continúan ocupando tierras. También ha realizado violentos desalojos. Así, colocan a los habitantes ante la situación de vivir años alquilando a precios altísimos (muchas veces impagables), a familias enteras a vivir hacinadas o directamente pasar a ser criminalizados como okupas. Estos vecinos han manifestado públicamente que su intención no es ser usurpadores sino comprar las tierras para poder comenzar a construir sus casas. "No somos ladrones, somos todas familias de Puerto Madryn que no tenemos dónde vivir. Queremos pagar estas tierras", dijeron.


Desde el Partido Obrero en Puerto Madryn planteamos: -Basta de especulación inmobiliaria. -Expropiación de los terrenos ociosos para poner en marcha un plan de viviendas bajo control obrero, cuyas cuotas no superen el 10 por ciento de los salarios. -Por un plan de urbanización -agua potable, cloacas, luz, gas- a cargo del gobierno provincial y municipal, de todos los asentamientos de la ciudad.