Políticas

25/4/1995|445

Quiénes ponen plata para Menem, Bordón y Massaccesi

Los partidos patronales son la inversión más lucrativa de los grandes grupos capitalistas. Es que, por medio de ellos, obtienen rendimientos  jugosísimos en términos de decretos, leyes y resoluciones, que compensan con creces la inversión realizada.


Un tesorero de Massaccesi dijo a La Prensa (23/4) que los grupos capitalistas “le ponen al PJ, al Frepaso y a nosotros, en ese orden”, revelando con ello que la base en la que se sostienen es exactamente la misma. Techint, Pérez Companc, Soldati y Roggio, los grandes beneficiarios de las privatizaciones, ponen en las tres principales candidaturas patronales, lo cual es lógico, porque responden a sus intereses y porque las tres prometen seguir privatizando y, en el caso de Bordón y Massaccesi, además, respetar lo hecho por el menemismo.


Sin ningún tapujo, las huestes de Bordón lanzaron el lema “invierta en Bordón”, seguramente porque ofrece suculentos beneficios a varios  grupos económicos que en el último período entraron en choque con el menemismo, como es el caso de la familia Macri o ciertos grupos exportadores que reclaman la devaluación. “Se sabe que ya colaboraron Enrique Pescarmona, Techint, Pérez Companc, Bunge y Born, Acindar, Pluspetrol, Pascual Mastellone y que la familia Macri está en la lista de los que quedan a visitar”. Todos éstos son grupos exportadores, a quienes Bordón “endulza” con las promesas de impulsar las exportaciones, lo que en buen romance significa reembolsos y devaluación.


“Los sectores más cercanos al menemismo ven con buenos ojos a Bordón”, confiesa el tesorero de éste, Horacio Ordeix.


El pedido de dinero de los tesoreros del PJ y del Frepaso revela que ambos pelean parte de una misma base de apoyo, es decir, los privatizadores ligados a la exportación.


Que Bordón es una variante del gran capital se revela también en la contabilidad de los fondos que recluta, porque la cuenta es auditada por Pistelli Díaz y Asociados, la representación en Argentina de Arthur Andersen, una auditoría de las multinacionales. Los bordonistas llegaron, además, a un acuerdo con American Express, Mastercard, Visa y Credencial para financiar los aportes.


Todo esto sin “contabilizar” al club de narcotraficantes, que aprovecha las campañas electorales no sólo para “lavar dinero”, sino fundamentalmente para ocupar posiciones en el propio Estado patronal.