Desde que comenzó la ola de frío, los vecinos de Quilmes sufrimos cortes de energía eléctrica. Cientos de familias quedamos sin luz, con dos grados bajo cero. A esto hay que sumarle las escuelas sin calefacción, donde se hace imposible el dictado de clases. Como siempre, el único medio para “llamar la atención” de las autoridades municipales es la acción directa: cortes de calles y movilizaciones conmovieron el miércoles y jueves las avenidas de todo el distrito.

A la falta de luz en nuestras casas y calor en las escuelas se suma el corte de provisión a las industrias; las patronales intentan pasar la pelota a los trabajadores, con los recortes de los plus por producción y reducción de horas. En algunas empresas ya amenazan con suspensiones.

Hace poco, sufrimos pérdidas de nuestros bienes, hepatitis y leptopirosis por las inundaciones. Ahora el frío, la falta de luz y gas, y la rebaja salarial.

Frente a la incompetencia de Villordo y el saqueo de las empresas privatizadas, reclamamos:

Reestatización sin pago de Edesur y su puesta en funcionamiento bajo control de los trabajadores.

Plan de obras públicas. Extensión de la red a todas las barriadas con la aplicación de tecnología moderna que evite la frecuente salida de servicio y la contaminación ambiental. Control vecinal de su planificación, ejecución y financiamiento.

Que se abran los libros contables del Municipio.

Fuera Villordo y su patota. Que una asamblea popular se haga cargo de los destinos del distrito.