Políticas

31/1/2008|1025

Repudiamos agresión criminal contra el MST de Neuquén


El viernes 18 de enero, en horas de la madrugada, una patota atacó el local del MST de la provincia de Neuquén. Dos compañeros que estaban en ese momento en el local fueron brutalmente apuñalados. Uno de ellos, Lázaro Duarte, de 81 años, se encuentra en grave estado; Jorge Rufino recibió siete puñaladas pero por suerte ya fue dado de alta.

El "modus operandi" de la patota que atacó a los compañeros demuestra que había existido un trabajo de inteligencia previo; los atacantes invocaron los nombres de los compañeros que estaban en el lugar para ingresar en el local.

La Fiscalía y la Policía afirman que se trató de un intento de robo, lo cual raya con la complicidad. El objetivo fue agredir a los militantes; el local carece de objetos de valor. Es ridículo hacer creer que ladrones tengan como objetivo atacar a locales de izquierda que tienen identificación política.

En Neuquén es ya característico el accionar de bandas amparadas por el poder. A partir de la huelga docente y del asesinato del compañero Carlos Fuentealba, bandas del MPN se dedican a amedrentar por todos los medios a la docencia, con especial saña contra el activismo. Las patotas paraoficiales atacan conflictos obreros y populares, valiéndose de la complicidad del poder y de las fuerzas de seguridad. Ahí están para demostrarlo el Casino, el Subte, la lucha de Dana, el Hospital Francés.

El Partido Obrero repudia la agresión contra los compañeros del MST de Neuquén, exige el esclarecimiento del atentado y compromete su participación en todas las iniciativas que sirvan para lograr estos objetivos.