La próxima semana, la Justicia Federal resolverá si confirma el procesamiento de trabajadores de limpieza de la Universidad Nacional del Comahue, acusadas de “usurpación” y “coacción agravada” por la toma del decanato de la Fadecs (Facultad de Derecho y Ciencias Sociales) en defensa de sus puestos de trabajo, tras quedar despedidas como resultado del fin de un contrato entre la Universidad y una empresa prestadora del servicio de mantenimiento.

La lucha se inició hace seis meses, con el masivo apoyo de movimientos estudiantiles y fuerzas políticas (entre ellas el Partido Obrero). La pelea desnudó un entramado de negociados entre las autoridades universitarias y empresarios y por eso existe este ensañamiento contra las compañeras.

 

Es un claro intento de criminalizar la lucha y de sentar un precedente negativo contra todo el movimiento obrero de la región.

 

Las abogadas defensoras de las compañeras han vuelto a mostrar en una audiencia desarrollada en el día de hoy que las acusaciones son completamente infundadas. Pidieron que se revoque el procesamiento, el desalojo que traería aparejado y el embargo que sería de 10.000 pesos por cada trabajadora.

 

Esta nueva etapa de la lucha despierta la necesidad de una convocatoria que debería ser masiva en defensa de la toma del decanato y en defensa de los puestos de trabajo de las compañeras para la próxima semana, cuando la justicia decida el caso.

 

Claudia Reyes, una de las empleadas demandadas aseguró al diario Río Negro, que pase lo que pase, “retirase no va a ser la alternativa” (29/9).

 

Entre los posibles procesamientos está también el de un compañero del PO que ha acompañado esta lucha desde sus comienzos.

 

Llamamos a todos los trabajadores de Río Negro y a los estudiantes en su totalidad a pronunciarse en contra del procesamiento de las trabajadoras y del desalojo, en defensa de sus puestos de trabajo.