En Rosario se ha conformado una Multisectorial del centroizquierdismo y sectores filo kirchneristas, cuya estrategia es la del “frente antimacrista” con sectores capitalistas y de colaboración de clases. Mostrando que su pretensión es de alcance político y no para apoyar o impulsar luchas, han elaborado un documento con pretensiones estratégicas donde se omite una delimitación con el kirchnerismo. Que lo hayan firmado fuerzas como el Frente Social y Popular, de Carlos Del Frade; la Unidad Popular, de Claudio Lozano, y grupos filo kirchneristas como Patria Grande o la conducción de Coad (docentes universitarios), no debe sorprender. Lo realmente grave es el acompañamiento dado por la izquierda y en especial por el PTS e Izquierda Socialista, que conforman, junto con el PO, el Frente de Izquierda a nivel nacional y en la provincia de Santa Fe. Su firma en el documento y la participación en una movilización cuyo único propósito era darlo a conocer, los coloca en un terreno opuesto al FIT.

 

¿Y el kirchnerismo? Bien, gracias

 

El documento firmado por la izquierda se propone desarrollar un “planteamiento (para) avanzar en los caminos de unidad”. ¿Pero unidad con quién? En el documento no hay una sola línea de delimitación con el kirchnerismo. Por eso, la firma del PTS e IS aparece junto con la de todos los grupos filo kirchneristas como el Frente de Unidad Guevarista, Causa, el Centro de Estudiantes de Humanidades de la UNR dirigido por los yaskistas —celestes de Mate Cocido, entre otros. 

 

Para justificar la unidad indiscriminada, el documento parte de la “avanzada represiva” macrista, con distintos episodios que hemos visto en las últimas luchas, como en la represión en la puerta de AGR-Clarín, o a los mapuche. Esto como si el ataque y la represión a la clase obrera hubiera comenzado con el gobierno macrista y por ello ahora surgiera una necesidad de unidad. El asunto es que los trabajadores de AGR ya fueron reprimidos bajo el kirchnerismo en 2004, y CFK se cansó de atacar a mansalva a los pueblos originarios, incluyendo el asesinato de los qom. La denuncia que hace el documento del intento de baja de la edad de imputabilidad es una creación del kirchnerismo y podemos continuar con la lista.

 

Por eso, como no podría ser de otra manera, la conclusión del documento es que se debe “unificar la resistencia”.

Pero con ese fin se debe señalar, antes que nada, con qué política esa resistencia debe ser unificada. En el caso de Rosario existen numerosos sindicatos referenciados en el Movimiento Sindical Rosarino, kirchnerista, que han conformado un espacio que también se propuso “unificar la resistencia”. Sin embargo, en sus propios gremios y lugares de trabajo han dejado pasar la ofensiva capitalista, empezando por la UOM y Empleados de Comercio. La ausencia de un balance de esta actuación no es casual, pues la “unificación” que busca la Multisectorial es con estos sectores. La docencia de Amsafe Rosario deberá debatir en profundidad su participación en este engendro, que busca colocarla detrás de las variantes de la burocracia sindical.

 

Las intenciones políticas

 

La primera convocatoria de esta Multisectorial fue hace unas semanas a partir de la represión a los mapuche. De allí salió una actividad de frente único, en la cual todas las corrientes políticas, junto a sindicatos como Amsafe Rosario, repudiamos la represión. Pero luego, a iniciativa de las principales corrientes del Frente Social y Popular (PCR y Patria Grande), se constituyó este “espacio permanente”, con este planteamiento político sobre la situación nacional, el cual se manifestó de forma práctica en la movilización del día jueves 26, la cual fue poco concurrida y con participación casi nula de los sindicatos firmantes.

 

Hay una intención clara por formar un bloque político en estos términos, comandado por el Frente Social y Popular. Un frente en el que su máximo referente y diputado provincial Carlos Del Frade debutó llamando a votar a Scioli en segunda vuelta. Un frente político que se movilizó codo a codo con el kirchnerismo el pasado 24 de marzo, y en la Marcha Federal junto a la burocracia sindical K sin distinción alguna. Un Frente Social y Popular que al mismo tiempo mantiene un acuerdo político en la Legislatura con el ala minoritaria de Rubén Giustiniani, del Partido Socialista, por ello las críticas de la Multisectorial al gobierno provincial son solo puntuales.

 

El PTS e IS, integrantes del Frente de Izquierda, se han sumado a este bloque de forma completamente oportunista. Buscan, a partir de su adherencia, cierto protagonismo en la escena política y en los medios de comunicación. Para ello dejan de lado el planteamiento político vector del Frente de Izquierda, que es la independencia política y el gobierno de los trabajadores.

 

El Partido Obrero llama a las fuerzas del FIT a defender al Frente de Izquierda y no confundir a los trabajadores tributando a un bloque que reúne a sectores filo kirchneristas, de centroizquierda y que defienden el nacionalismo burgués.