Desde hace 24 años el Banco Macro es el agente financiero de la provincia a partir del proceso de privatización del banco provincial. Ese proceso lo inició el entonces gobernador Roberto Ulloa, quien fuera también gobernador durante la última dictadura, y lo concluyó Juan Carlos Romero.

El Macro de ser una mesa de dinero ha pasado a ser el banco, de “capitales nacionales”, más grande del país a partir de que se quedó con los bancos provinciales de Misiones, Salta y Jujuy, todas provincias de frontera. Este banco fue más de una vez señalado en investigaciones de lavado de dinero e incluso fue involucrado uno de sus más reconocidos presidentes en la causa Ciccone.

El banco, en lugar de pagar un canon por el contrato que hace que cada peso que entra a la provincia pase por ahí, cobra enormes comisiones. Allí por ejemplo se depositaron créditos muy importantes pedidos por Urtubey, como el de la Reparación Histórica y el Fondo del Bicentenario, en plazos fijos con tasas menores a la que se le daría a cualquier cliente.

De la privatización del Banco Provincial solo hay un beneficiario y se el banco Macro.

El debate en el Senado

En su última sesión, del 23 de abril de 2020, el senado salteño aprobó un proyecto de resolución del burócrata del sindicato de taxistas, el senador por Guachipas José Ibarra, que solicita al ejecutivo provincial que renegocie el contrato vigente con el Banco Macro, agente financiero provincial.

El proyecto, aprobado por unanimidad, viene a cuento de que la provincia necesita recaudar en medio de la crisis. La iniciativa plantea algunas pautas de esa renegociación como el pago de un canon fijo y otro variable, y la gratuidad de la mayoría de los “servicios” que hoy presta el Macro a la provincia. Según lo que denunciaron varios senadores, los contratos que tiene este banco con otras provincias son mucho menos onerosos que el de Salta.

Una “banca estatal” para la burguesía

El vicegobernador y presidente del senado, Antonio Marocco, hombre fundador del partido de Alberto Fernández en Salta, ha desenvuelto también una posición respecto a este tema.

El planteo de Marocco es que la provincia vuelva a tener una banca pública, como lo fue en su momento el Banco Provincial de Salta, que otorgue créditos a tasas favorables con recursos provinciales, a sectores vinculados a la producción. Puso de ejemplo, en los medios, a La Pampa que otorgó créditos a tasa cero.

Es claro que el vicegobernador quiere una banca estatal para rescatar a una parte de la burguesía local y la que tienen negocios en la provincia, en medio de la crisis. No podemos olvidar que el banco provincial se privatizó con la excusa de su inviabilidad, luego de que otorgara innumerable cantidad de créditos a sectores de la burguesía y la oligarquía salteña que fueron verdaderos paga Dios.

Marocco, en las entrevistas, dejó claro que él no pretende de ninguna manera estatizar ni sacar al Macro, cuyo contrato vence en 2026.

El régimen oligárquico es agente del Macro

Hay que llamar la atención a la población de que los senadores que aprobaron esta resolución, son y han sido parte del régimen oligárquico que gobierna Salta desde hace 25 años con Romero, Urtubey y ahora Sáenz y que ha defendido siempre los negocios del Macro y de otras empresas vinculadas.

En el año 2004, durante el gobierno de Romero, el parlamento salteño aprobó una prórroga de 10 años del contrato, cuando el mismo vencía en 2006. Lo mismo hizo Urtubey, en 2014, adelantando casi dos años la renovación. En ambos casos desde las bancadas del Partido Obrero denunciamos y rechazamos la continuidad de este negocio. Los senadores que ahora piden la renegociación del contrato han sido parte del régimen político que impulsó este negocio, y más de uno votó las prórrogas ya sea en el senado u ocupando una banca en diputados.

Lo votado por el senado no pasa de ser una declaración política ya que el proyecto de resolución no tiene ningún efecto concreto. Probablemente, además de la demagogia en medio de la crisis, su aprobación puede estar expresando algunos cortocircuitos en la burguesía salteña. También la instalación del tema se debe a lo escandaloso y oneroso que es este contrato para la provincia. Al mismo tiempo refleja que se está procesando un debate sobre quién debe pagar el costo de la crisis.

Estatización del Macro y nacionalización de la banca

El Partido Obrero y el Frente de Izquierda somos los únicos que planteamos la necesidad de nacionalizar la banca. En el camino hay que estatizar el Macro bajo control obrero, planteo que hemos defendido siempre, desde que se privatizó el Banco Provincia. La única forma de que se acabe el curro del Macro es esta, y además permitiría colocar los recursos que hoy solo benefician al banco para desenvolver un plan económico que beneficie al conjunto de la población salteña.