Políticas

7/7/2007|894

Salta: La huelga docente y el PO


La represión del viernes, absolutamente planificada, incluyó las detenciones de los compañeros de la bancada obrera del PO en la Legislatura, Claudio Del Plá y Pablo López. La represión comenzó a prepararse mediante reuniones previas de punteros en los barrios para boicotear la marcha, continuó con el enorme operativo dispuesto en la Legislatura y fue ratificada por la solicitada publicada en El Tribuno (4/4) por el gobierno de Romero. La solicitada afirma que la huelga se ha desvirtuado por la presencia de activistas, y ataca directamente al PO, hablando de “posiciones ideológicas extremas”.


 


Pero la represión, lejos de amedrentar a los maestros, polarizó a la opinión pública contra el gobierno. Hubo importantes movilizaciones en Orán y Tartagal la misma noche de la represión, y al otro día también en Rosario de la Frontera, y una asamblea en Tartagal con la presencia de padres. La huelga se ha popularizado, el movimiento que comenzó muy despolitizado ha ido sacando diversas conclusiones a partir del rol del aparato represivo y el papel del Parlamento. ATE ha intentado erigirse en dirección del conflicto, pero fue derrota en la votación las dos veces que reclamó concentrar las funciones negociadoras.


 


Nuestro esfuerzo está puesto por entero en el triunfo de la lucha. Con audacia, hay que dar impulso a las asambleas comunes de docentes con el resto de los trabajadores y los padres -con el ejemplo de la asamblea de Tartagal que reunió a 700 personas el sábado pasado.


 


En tres días de actividad se han vendido 480 prensas en Salta Capital, un signo de que Prensa Obrera se ha convertido en parte de la huelga docente.