Los autoconvocados de Tucumán, aunque tienen un fondo de huelga propio, les entregaron a los trabajadores de Terrabusi la plata que habían juntado en la provincia para ellos.

– El viernes hubo otra pueblada con 18.000 personas. ¿Sanidad es el Kraft de Tucumán?

– Absolutamente. La de ayer fue la más grande manifestación popular de los últimos años de la provincia. Y en la Plaza Independencia se empiezan a sumar autoconvocados de todos los gremios donde las burocracias sindicales trataron de aislarnos. Pero la clase trabajadora ve en la salud la posibilidad de un triunfo y toma estos métodos. Por eso los burócratas llegan a actitudes insospechadas. La policía irrumpió en los hospitales por pedido de ATSA, un gremio que responde a la CTA. La burocracia está caduca, ayer, en la plaza, estaban autoconvocándose el sindicato de vialidad –uno de los más grandes de la provincia–; los docentes, los estatales. Hasta los familiares de policía se están autoconvocando. La policía se retiró pidiéndonos volantes, entregando cartas de adhesión y dejando contactos con sus familiares. El gobierno provincial empieza a temblar.

– ¿Los presionan para que se encuadren sindicalmente?

– Muchas veces el peor enemigo es el interno. Dentro del cuerpo de delegados tenemos muchas dificultades con sectores muy conciliadores que responden a políticas de izquierda, al peronismo “disidente” (la otra camarilla del peronismo) y a la iglesia. Nosotros entendemos que si esta lucha triunfa puede surgir un sindicato antiburocrático, combativo. Será el paso siguiente, siempre y cuando triunfemos.

– Mencionaste a la Iglesia…

– El obispo Villalba hizo de intermediario. Pero la Iglesia nunca está a favor del triunfo de la clase obrera. Los obispos dijeron que la democracia no se da en las calles ni en asambleas.

Entonces no sabemos dónde se da, en las urnas tampoco. Ninguno de los que nos gobiernan responden a las demandas de los trabajadores que los votan. Ayer Alperovich dijo que se sorprendía de la cantidad de pobres que se inscriben en el plan del gobierno. A nosotros no nos sorprenden, porque vivimos con los pobres, trabajamos con ellos y somos parte de ellos.

Cuando la gente empieza a despertar y a tomar conciencia de que se puede ir por las reivindicaciones y triunfar, creo que a este gobierno le queda muy poco camino.

– ¿La victoria significa que se podría recuperar ATSA?

– Podríamos recuperar ATSA. La burocracia acaba de recular. Tenía elecciones y la postergaron hasta diciembre de 2010. Sabían que perdían por goleada. Como les pasó en Kraft les va a pasar en todos lados.

– Dos palabras sobre la conferencia…

– Dos palabras son poco. Esta Conferencia apunta al corazón de las resoluciones de la clase obrera. Me conmovió ver cómo en todo el país los compañeros luchan contra la burocracia, el gobierno, la Iglesia, las corrientes conciliadoras. Esta Conferencia da cuenta de que la lucha es posible y se gana con organización, asambleas, sindicatos de base y combativos. Y por supuesto, con una clara conciencia de clase, que es la base para derrotar a esta burocracia carnera. Quiero felicitarlo al Partido Obrero porque da muestras claras de cuál es la dirección de la lucha. A partir de acá nace una nueva clase sindical, clasista, combativa, y es el principio del nacimiento para nosotros, para los trabajadores.